Nació en Ovada (Liguria) el año 1694; de joven ayudó a su padre en el oficio de mercader. Movido por el deseo de perfección, renunció a todo y se dedicó al servicio de los pobres y los enfermos, juntándosele después varios compañeros. Ordenado sacerdote, trabajó con intensidad creciente por el bien de las almas, estableciendo casas de la Congregación que él había fundado, ejerciendo la actividad apostólica y mortificándose con duras penitencias.