Científicos franceses del laboratorio Kallistem, en Lyon, anunciaron el 8 de mayo, que produjeron espermatozoides humanos in vitro. Aún no han publicado esto en una revista científica. Después de 15 años de trabajo, a fines del 2014 produjeron en el laboratorio espermatozoides humanos, usaron biopsias de testículos de pacientes que contenían pocas células germinales inmaduras o espermatogonias.
Los investigadores argumentan que esto podría ayudar a varones infértiles que padecen una azoospermia obstructiva o un defecto en el proceso de la producción de espermatozoides. La compañía calcula que esto generaría 2.3 billones de euros ($2.58 billones).
El Profesor Israel Nisand, cofundador del Foro Europeo de Bioética dijo a Le Figaro que esto sería mejor que la clonación reproductiva. Otros expertos han recibido la noticia con cautela.
Datos biológicos
Las espermatogonias son células con material de herencia completo, 46 cromosomas (número diploide), presentes en los testículos desde in utero, y son las que entrarán en proceso de meiosis (división celular en que se reduce el material de herencia a 23 cromosomas-número haploide).
Las espermatogonias tienen 3 funciones:
• La primera, en la espermatogonia se inicia la espermatogénesis, proceso por el que se forman los espermatozoides.
• Segunda, las espermatogonias aumentan, de manera importante, la población de células germinales por las mitosis, división celular en que se conserva el número de 46 cromosomas, antes de entrar en meiosis. Una espermatogonia entra en 8 o 9 mitosis en promedio antes de convertirse en espermatocito primario y entrar a meiosis. Un espermatocito primario sufre dos divisiones meióticas, por lo que una espermatogonia puede producir de 2048 espermatozoides hasta 4096 dependiendo del número de mitosis.
• Tercera, regula el número de células germinales por la población de espermatogonias.
Análisis ético
Al fabricar espermatozoides en el laboratorio (espermatogénesis artificial) es una manipulación genética de gametos. Durante la meiosis pueden suceder alteraciones numéricas en los cromosomas (trisomías o monosomías) y estructurales (deleciones, inserciones, inversiones). Si hay concepción, estos gametos anormales podrían causar que los bebés tuvieran enfermedades cromosómicas como trísomía 21 o Cri du Chat, entre otras. También la manipulación genética podría producir mutaciones que ocasionarían enfermedades génicas. Con la espermatogénesis in vitro no se puede prever cómo afectaría al futuro bebé o a su descendencia.
La manipulación de gametos podría abrir la puerta a la eugenesia a través de la selección de ciertas características biológicas al fabricar los espermatozoides en el laboratorio.
La producción de espermatozoides en el laboratorio implicaría que se utilizaran en procesos de inseminación artificial o fertilización in vitro lo cual conlleva implicaciones éticas.
El varón del cual se toman las espermatogonias, ¿lo sabe? Podría usarse postmortem y en procesos heterólogos.
El fabricar espermatozoides en el laboratorio abriría la posibilidad de que también se buscara producir gametos a partir de células somáticas.
La manipulación de gametos, podría también llevar a tratar de obtener un embrión a partir de la unión de dos espermatozoides o de dos óvulos.
El enunciado del Profesor Nisand de que es mejor la producción in vitro de espermatozoides que la clonación reproductiva no es una correcta aplicación del principio del mal menor, ya que existe un bien reconocido que sería no realizar ninguna de las dos.
Llama la atención que pongan como indicación la azoospermia obstructiva, ya que en ésta los espermatozoides si se producen en el testículo pero no pueden salir y por lo tanto son puncionados directamente del testículo y utilizados para procesos de reproducción artificial. La espermatogénesis sí se lleva a cabo en el testículo.
Atrás de la producción de espermatozoides en el laboratorio está un fuerte interés económico, las ganancias las calculan billonarias.
La producción de espermatozoides en el laboratorio no asiste el proceso de la procreación, sino sería un paso más de alguna técnica de reproducción artificial, entrando a la lógica de la producción de seres humanos a toda costa y fuera del contexto de la entrega y el amor esponsal.