Al tiempo que escribo esta nota, hay 48 Estaciones de Radio Católicas al aire en los Estados Unidos. La Radiodifusión católica esta creciendo rápidamente. Han habido sucesos notables y publicaciones altamente erróneas. Yo creo que es tiempo de que realmente nos detengamos y demos una mirada a lo que constituye el éxito en la Radiodifusión Católica. Mi experiencia de años pasados es que no todo el mundo está de acuerdo en este tema, y a menos que nos detengamos ocasionalmente y vayamos a través del ejercicio de revisar los hechos que definen el éxito en nuestro trabajo, y a menos que nos volvamos a preguntar sobre nuestras razones existenciales, nos exponemos a la potencial satisfacción y al estancamiento. Así es que por virtud del consistente aguijoneo de los amigos y colegas y en el último interés de la Radiodifusión Católica, que nuevamente ofrezco mis pensamientos sobre este importante tema. Como siempre sus comentarios son bienvenidos
I. Una exitosa Estación de Radio "Católica" esta encomendada a promover la fe Romana Católica y opera con una Misión o Meta claramente definida.
Hay muchos apostolados en la Iglesia, como se evidencia en los cientos de órdenes religiosas e institutos de vida consagrada. Cada una de estas órdenes religiosas debe de tener una Misión claramente definida antes de que la Iglesia apruebe su existencia. Algunas órdenes son simplemente devotas a una vida de oración, otras tienen como su única labor el ministerio de la pobreza, y otros son misioneros. En muchos aspectos esto esta dirigido por el viejo adagio "no se puede ser todas las cosas para toda la gente". Para tener éxito te debes focalizarte.
Así es que, no solamente con la Radio Católica, sino que con cualquier otra Emisora.
Las Estaciones Comerciales lo llaman posicionamiento y tarjeta de demostración. En la Radio Católica nos referimos a ello más frecuentemente que como la "Misión" de una estación.
Una explicación de la Misión debe contener metas claras con relación al pedido del segmento de audiencia primaria, aproximándose a ser utilizadas por el apostolado de las estaciones (e.g. Noticias Católicas, educación, evangelización, etc.) Esta misión debe ser escrita y publicada como una referencia lista para llevar las cosas en camino. En el análisis final, si una estación, que se proclama a si misma Católica, no merece el posicionamiento de su meta o Misión, su razón para existir puede ser llamada a cuestión y su oportunidad para triunfar eliminada.
II. Una Estación de Radio Católica tiene la aprobación de la orden de la misa local.
Nosotros somos el Cuerpo de Cristo. La Iglesia está basada en Cristo como su cabeza y el Papa y los Obispos Diocesanos como los representantes de Nuestro Señor. El Obispo de una Diócesis tiene el poder para despojar a una estación de su aprobación y su "Catolicismo" si él lo escoge. Cualquiera que sea radiodifusor Católico que no incluya al Obispo local en su planeamiento y operaciones están fraguando un escenario de potencial ruina que podría ser tremendamente costoso. (Verse las explicaciones recientes por NCCB con respecto a lo requerido para la aprobación Episcopal para esas entidades que se estilan así mismas como "Católicas")
La aprobación y la bendición de la orden de misa local no significa que la Diócesis tiene que soportarlas económicamente pero significa que el Obispo (o su representante) debe estar en la rueda de programación. Quisiera creer que no es que el Obispo quiera controlar la programación (lo que sería ilegal a menos que ellos fueran licenciados de una estación), así mismo deben sentir que tienen alguna confianza de la "Catolicidad" de las estaciones y que el Magisterio de la Iglesia será honrado. Ningún Obispo quiere una Estación de Radio "Católica" en su campo que esté "fuera de control". Recuerden que un Obispo Diocesano es tan agudamente cuidadoso, que el público en general percibiría a una estación de radio "Católica" sin los límites de su Diócesis, como una extensión de la Iglesia Católica, y así el Obispo mismo.
III. Una estación de radio Católica exitosa está en la posibilidad de soportar sus operaciones económicamente basándose en las contribuciones de sus oyentes.
Si una Estación Católica es exitosa podrá mantenerse a si misma con las contribuciones y consolidarse e base a sus oyentes. Esto está basado en el factor de que una estación exitosa tendrá una audiencia como consecuencia y el soporte económico vendrá de la venta de anuncios o contribuciones como resultado de esa audiencia. Consideren el echo de una Estación Católica que no pueda derivar contribuciones primarias de sus oyentes. En el caso de que haya un número insuficiente de oyentes, o que los oyentes o auspiciadores no crean en las premisas de la estación. Ciertamente habrá donaciones provenientes de fundaciones y benefactores, pero las fundaciones no son para siempre y los benefactores mueren. Una verdadera Estación Católica exitosa ejercitaría la responsabilidad fiscal a través del presupuesteo y la planificación y derivaría el capital operante para llevar acabo esto directamente de las contribuciones de los oyentes
IV. Una Estación de Radio Católica exitosa tiene el apoyo económico de sus oyentes en consecuencia a su mercadeo.
Y así llegamos al verdadero cimiento del éxito de la radiodifusión. No existe allá afuera un Radiodifusor Católico que no preferiría tener su estación de radio como la número 1 en audiencia en el mercado. Los oyentes son una parte intrínseca e inseparable de la Radiodifusión. Al final no importa tu meta o formato de programa, los oyentes son acerca de lo que la radiodifusión se trata, y esas estaciones que tienen audiencias de tamaño grande emiten verdadero poder y respeto. Si una estación de radiodifusión no tiene audiencia, es un gran desperdicio de dinero, esfuerzo y energía eléctrica, existiendo solamente como un monumento al sueño de alguien.
La oración es poderosa, pero en la radio Católica, no hay garantía de que "si tu construyes ellos vendrán". Hemos logrado darnos cuenta porque encendemos un radio y nos conectamos a la programación católica no quiere decir que tenga una audiencia de consideración.
La realidad es que para que una estación tenga sintonía, la mayoría de la población necesita encontrar atractiva a la estación debido a algún beneficio percibido.
Todo radiodifusor Católico que lea esto será rápido en señalar que han logrado "una audiencia" que, en términos absolutos, es probablemente verdad. El punto es que si la explicación de tu misión dice que tu apostolado es la evangelización y vas a propagar la palabra de Dios "a todas las gentes", pero en realidad solo tienes "al coro" escuchando a tu estación, algo está mal. Si tu sientes que la explicación de tu misión estipula que tu apostolado es solo para ese "coro" o solo para los "piadosos", estás tristemente saltando el verdadero poder de la radiodifusión y haciéndose más difícil financiar tu esfuerzo.
Como radiodifusores Católicos nunca hablamos acerca de compartir el marketeo y el rating. ¿ Por qué es eso? Todas las otras estaciones lo hacen. En los años transcurridos he oído expresiones acerca de que la programación filosófica de esta o aquella estación Católica "no era conducida hacia el rating".
Algunas veces siento que esto era una simple excusa para explicar el echo de que la estación en primer lugar no tenía una audiencia.
Estaría de acuerdo en decir que el rating de audiencia no lo comienza ni lo acaba todo, pero si no estamos tratando de atraer audiencia para poder enviar nuestro mensaje, qué estamos haciendo en realidad? Debemos continuar atrayendo nuevos oyentes y más grandes audiencias para acompañar nuestra misión. Todo radiodifusor Católico debería ser cuidadoso con el rating de su estación. Esta puede ser una experiencia aterradora porque puede traer a cuestión la razón de la existencia de una estación. Una estación de radio que está en el rango superior de todas las señales lo debe a su mercadeo basado en compartir la audiencia. Los reportes de rating son una libreta informativa que realmente puede confirmar o cuestionar el éxito.
La familia de radios Católicas disminuyeron porque "fallaron en controlar los gastos".
En la otra mano, nunca nadie había hablado sobre compartir audiencia y los rangos del mercado de estas estaciones comerciales, así es que debo decirles que la responsabilidad fiscal es importante, pero acaso estas estaciones estuvieron atrayendo suficiente audiencia y haciendo impacto en las comunidades a las que servían a través de programación adecuada y promoción, ellos seguirán vendiendo reclames, prosperando financieramente y propagando la palabra en vez de tratar de buscar los modos para vender sus propiedades y salir del negocio.
La programación esta sobre el alcance de este papel. Es suficiente decir que, a través de los tiempos, he encontrado que nuestro fervor como radiodifusores Católicos afecta nuestra habilidad para programar nuestras estaciones para atraer a la audiencia. Los programas de nivel no necesitan ser profanos o estar en contra de los valores de la Iglesia, pero para ser exitosos debemos ser altamente creativos y hablar al blanco de las estaciones, ambos eclesiales y no eclesiales. Cuantas veces hemos oído las formalidades dadas a la TV y a la radio PSAs producidas por nuestros hermanos Mormones. Estas radiodifusoras de nivel están simplemente hablando al corazón de las masas y funciona. Una estación de radio Católica exitosa alcanza a la totalidad de la población, ha definido su posición o su misión. Un predicador famoso dijo una vez, "Ustedes tiene que llevarlos dentro de la tienda antes de entregar el mensaje".
Sumario:
Tomando todos los precedentes en consideración, Yo propondría que el éxito de una estación de radio Católica depende del balance y la interacción de cuatro productos primarios, cada uno de ellos siendo afectado y en algunos casos dependiendo de los otros.
Una estación de radio Católica exitosa:
1.Tener la aprobación de la orden de misa local.
2. Programación y promoción profesional y de nivel, consistente con el Magisterio y las enseñanzas de la Iglesia que dibuja oyentes y es responsable de una Misión Católica y un propósito bien definido.
3. Está permitido sustentarse principalmente a si mismas con las contribuciones de los oyentes.
4.Generar una consistente y viable base de oyentes, la demografía de esta depende de la misión de la estación, y el tamaño de esta es consecuente al mercadeo, justificando la existencia de la estación.
Este modelo de éxito deja la puerta abierta para varias opciones de formato y aproximaciones de programación, pero no importa que aproximación de programación sea utilizada, la estación debe generar una audiencia de al menos la talla suficiente para soportar económicamente sus operaciones ya sean comerciales o no comerciales.
Marty Wind,
Secretaría para las Comunicaciones
Diócesis del Corpus Christi
Texas
(mwind@GoCCN.org)