El Cardenal Raymundo Damasceno Assis, presidió la Misa en la que se proclamó Beata a Isabel Cristina Mrad Campos, joven mártir conocida como la "María Goretti de Brasil".
Según informa la Arquidiócesis de Mariana en el estado brasileño de Minas Gerais, el Cardenal presidió la Misa en el Santuario de Nossa Senhora da Piedade, en Barbacena, ante miles de fieles presentes.
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La joven brasileña tenía 20 años cuando fue brutalmente asesinada en 1982, por un hombre que quiso violarla sin lograrlo; como ocurrió con Santa María Goretti, la niña italiana que murió defendiendo su virtud y antes de morir perdonó a su asesino.
En su homilía, el Cardenal Damasceno resaltó el pasaje del Evangelio del día en el que Jesús advertía a los Apóstoles: "No teman a los que matan el cuerpo pero no pueden matar el alma".
El Purpurado brasileño dijo luego que Isabel no tuvo miedo. ""La sangre de los mártires -según Tertuliano- es semilla de nuevos cristianos", dijo.
Citando luego al Obispo San Oscar Romero, el Cardenal recordó una cita suya: "El martirio es una gracia de Dios, que no merezco. Con el sacrificio de mi vida, espero que mi sangre sea semilla de libertad y signo de que la esperanza se hará realidad".
El también Arzobispo Emérito de Aparecida dijo en su homilía que "la fe testimoniada se convierte en martirio cotidiano, en la experiencia de la verdad, la justicia, el perdón, la solidaridad, la alegría, el amor y la paz".
El Cardenal resaltó luego que, desde niña, Isabel Cristina aprendió los valores del Evangelio y se arraigaron en su corazón.
Tras hacer un enérgico llamado a que se detenga la violencia contra las mujeres, el Purpurado resaltó el ejemplo de la nueva Beata "nos ayude a renovar nuestra adhesión al martirio, en la fidelidad al Evangelio, conformados a Cristo".
"Que tu ejemplo nos dé valor para aceptar las cruces, los sufrimientos, las angustias y los dolores de nuestra vida cotidiana. Si estamos con Jesús, mártir por excelencia, mártir de los mártires, ¡no tenemos nada que temer!", subrayó.
Breve biografía de la nueva Beata Isabel Cristina Mrad
Isabel Cristina Mrad nació el 29 de julio de 1962 en Barbacena, estado de Minas Gerais, y fue criada por sus padres católicos José Mendes Campos y Helena Mrad.
Isabel solía asistir con frecuencia a Misa y recibir los sacramentos. Según la Arquidiócesis de Mariana, la joven era particularmente "sensible" ante "los más pobres, los ancianos y los niños, algo que ciertamente aprendió en su familia, que era vicentina".
Desde la adolescencia, Isabel formó parte de la asociación de voluntariado de la "Conferencia de San Vicente" y su padre fue presidente del Consejo Vicentino de Barbacena.
Isabel se mudó a Juiz de Fora, también en Minas Gerais, en 1982, para asistir a un curso de preparación para ingresar a la Facultad de Medicina, ya que soñaba con ser pediatra para ayudar a los niños necesitados.
Además de prepararse para estudiar, Isabel solía rezar en la Iglesia del Cenáculo, "donde estaba expuesto el Santísimo Sacramento".
Ese año la joven se mudó con su hermano Paulo Roberto a un pequeño departamento y se encontraba arreglándolo cuando el 1 de septiembre, un hombre que fue a armar un ropero intentó violarla.
Como Isabel se resistió para mantener su castidad, el hombre se tornó agresivo y la golpeó con una silla en la cabeza, para luego amarrarla, amordazarla, rasgarle la ropa y torturarla.
Como la joven resistió para defender su pureza, el hombre la apuñaló hasta matarla.
Durante la investigación del homicidio se encontró una alfombra empapada en sangre, y se descubrió que la joven había recibido 15 puñaladas: dos en sus partes íntimas y 13 en la espalda.
Los médicos legistas confirmaron que el asesino no consiguió violarla.
El proceso de beatificación se inició en el año 2001.
La tumba de Isabel Cristina Mrad, la María Goretti de Brasil, está donde ahora fue beatificada en Barbacena. Allí fue bautizada y recibió la Primera Comunión.
La iglesia es ahora un lugar de peregrinación para muchos fieles en Brasil, quienes rezan ante sus restos pidiendo su intercesión.