El Vaticano anunció este viernes 28 de febrero la institución del grupo de apoyo que asesorará a las Conferencias Episcopales, Institutos Religiosos y Sociedades de Vida Apostólica en la preparación de las líneas guía para la protección de menores.
La decisión de establecer este grupo de apoyo, conocido como task force, se adoptó tras el encuentro sobre protección de menores en la Iglesia que se desarrolló en el Vaticano del 21 al 24 de febrero del año 2019.
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Ahora, el Papa Francisco ha decidido que el grupo esté supervisado por Mons. Edgar Peña Parra, Sustituto para los Asuntos Generales de la Secretaría de Estado, junto con el Cardenal Oswald Gracias, Arzobispo de Bombay, el Cardenal Blase Joseph Cupich, Arzobispo de Chicago, Mons. Charles Jude Scicluna, Arzobispo de Malta y Secretario adjunto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, y el Padre Hans Zollner, Presidente del Instituto de Psicología de la Pontificia Universidad Gregoriana y miembros de la Pontificia Comisión para la tutela de Menores.
En un comunicado de prensa difundido por el Vaticano, se explica que el Santo Padre decidió que esta task force "asista a las Conferencias Episcopales, los Institutos Religiosos y Sociedades de Vida Apostólica, a partir de su solicitud, en la preparación y actualización de las líneas guía en materia de protección de menores".
Esa ayuda se realizará "en conformidad con las indicaciones emanadas de la Congregación para la Doctrina de la Fe, así como con lo establecido en la legislación canónica vigente en materia de abusos y, en particular, con el Motu proprio Vos estis lux mundo del 7 de mayo de 2019".
Asimismo, el Papa estableció que "la preparación de las líneas guía permanecerá como competencia y bajo la responsabilidad de las respectivas Conferencias Episcopales, de los Institutos Religiosos y de las Sociedades de Vida Apostólica".
El grupo de trabajo "tendrá una duración de dos años, a partir del 24 de febrero de 2020". Además de estar supervisado por Mons. Peña Parra, el grupo de trabajo contará con un coordinador, que será el laico Andrew Azzopardi, responsable de la Comisión de Protección para la tutela de menores y de los adultos vulnerables de la Provincia Eclesial Maltés, y de algunos expertos en derecho canónico de diferentes nacionalidades".
Como coordinador, Azzopardi informará con periodicidad trimestral de las actividades del task force al Sustituto para los Asuntos Generales de la Secretaría de Estado. El Pontífice también decidió que "las actividades del grupo de trabajo estén sostenidas por un fondo especial constituido por benefactores.
Por último, "las peticiones de asistencia por parte de las Conferencias Episcopales, Institutos Religiosos y Sociedades de Vida Apostólica deberán enviarse al correo electrónico taskforce@org.va.
Conferencias Episcopales con dificultades
En un encuentro mantenido con los medios de comunicación para explicar el cometido de este grupo de trabajo, Mons. Juan Ignacio Arrieta, Secretario del Pontificio Consejo para los Textos Legislativos, señaló que la función de este grupo de trabajo es dar apoyo a aquellas Conferencias Episcopales, Institutos Religiosos y Sociedades de Vida Apostólica que por su situación o características carezcan de los recursos para confeccionar esas líneas guía.
"Hay Conferencias Episcopales con suficientes recursos y capacidades para poder gestionarlo, pero hay otras, en países de África, por ejemplo, países que están en guerra, que no pueden hacerlo", explicó.
Subrayó que "son las Conferencias Episcopales las que piden ayuda. Por ejemplo, al Conferencia Episcopal de Estados Unidos seguramente no la necesite, porque ya tiene a sus expertos. Pero una Conferencia Episcopal de un país difícil, sí puede necesitarlo".
Además, insistió en que estas líneas guía son diferentes al anunciado vademécum sobre la protección de menores: "Son cosas distintas".
"Las líneas guía son indicaciones de cómo tratar estos casos desde el punto de vista psicológico, de asistencia a las personas". En cambio, "el vademécum está más dirigido a especificar los procedimientos jurídicos, fundamentalmente, pero también pastorales, sobre cómo gestionar el procedimiento penal, el conocimiento de las causas, el juicio, etcétera".