La propuesta de ley sobre eutanasia en Chile ha vuelto al debate público tras conocerse el caso de una niña de 14 años que padece fibrosis quística -una enfermedad degenerativa e incurable- que grabó un video en donde pedía reunirse con la Presidenta Michelle Bachelet para pedirle su autorización para una inyección que le permitiera quedarse "dormida para siempre".
Tras la difusión mundial del video, Valentina Maureira cambió de opinión y optó por promover un mensaje de lucha por la vida, no solo en su caso sino en el de todos los afectados por la fibrosis quística.
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"Ahora está decidida a luchar por su vida y la de otros niños que padezcan su grave enfermedad", dijo Freddy Maureira, el padre de Valentina, a Radio Bio Bio. "Incluso le pidió a la presidenta una cámara de video para grabar su testimonio con el fin de ayudar a otros niños en su misma situación", dijo el padre en alusión al encuentro que sostuvo con la mandataria.
¿Oportunismo?
Valentina ya no quiere morir. Sin embargo, el presidente de la Comisión de Salud del Senado de Chile, Guido Girardi, del Partido por la Democracia, se valió de su drama para anunciar que repondrá la discusión del proyecto de ley sobre eutanasia, del cual es uno de sus autores.
"Voy a reponer el debate sobre la muerte digna para establecer como un derecho humano el poder decidir qué hacer ante enfermedades terminales sin solución", afirmó Girardi durante su intervención en el Parlamento.
En entrevista a ACI Prensa, el abogado y asesor legislativo en derechos humanos, Pablo Urquízar, advirtió que la reactivación de los proyectos de ley presentados, "más que dignificar la vida de los más vulnerables, lo que hacen es tratar a las personas como objetos desechables debido a su complejo estado de salud y vulnerabilidad".
Además, en declaraciones a la prensa, el padre de Valentina acusó al senador Guido Girardi de estar utilizando el drama de su hija para fines políticos. "¿Por qué ahora? ¿Por qué se quieren colgar de mi hija ahora que es conocida a nivel mundial?", señaló.
El senador ya había presentado dos proyectos de despenalización de la eutanasia en 2000 y 2006 pero que no entraron en discusión en la Comisión de Salud.
Otro impulsor del proyecto es el senador Fulvio Rossi (Partido Socialista), quien dentro de poco asumirá el cargo de presidente de la Comisión de Salud del Senado, quien señaló también dicha instancia de discusión que "un ser humano debe tener el derecho a poder ejercer la libertad y poder decidir no sólo cómo vivir, sino también cómo y cuándo morir".
La iniciativa causó diferentes reacciones entre los parlamentarios presentes, como es el caso de la senadora de la Comisión de Salud, Jacqueline van Rysselberghe (Unidad Demócrata Independiente), quien calificó la eutanasia como "un homicidio".
"Como médicos tenemos una formación para poder asistir, mejorar, ayudar a que las personas pasen de mejor manera su enfermedad y no estamos ni nos formamos en nuestra carrera para poder asesinar personas, independientemente de la condición que éstas tengan", observó la parlamentaria.
Según Pablo Urquízar, lo que "está detrás de estos proyectos de ley de eutanasia es la ideología de lo desechable, que pretende hacernos ver que la muerte intencional de una persona que se encuentra en un estado absolutamente vulnerable es la solución al problema de su enfermedad" agregó Urquízar.
El abogado señaló que "existen muchos parlamentarios que conociendo los propósitos ideológicos del Gobierno, se están preparando para que desde la razón –como corresponde en el parlamento- se pueda cambiar el rumbo de estos proyectos, que en nada ayudan al ser humano porque, en mayor o menor medida, omiten la naturaleza humana y con ello la dignidad de las personas".
La eutanasia en Chile está penalizada por el artículo 393 del Código Penal de Chile. Ya existían tres mociones vigentes presentadas entre 2011 y 2014 pero que nunca llegaron a ser prioridad en la agenda legislativa.
El debate sobre la legalización de la eutanasia se suma a la lista de proyectos de ley contemplados en la agenda del gobierno de Bachelet que tienen relación directa con la vida y la familia, como el de la despenalización del aborto y el matrimonio homosexual.
