En un hecho sin precedentes en Uruguay, una jueza ordenó la prohibición de un aborto al que se iba a someter una mujer luego que el padre del niño presentara un recurso de amparo para proteger la vida de su hijo en gestación.
Además del recurso de amparo, el representante del demandante, abogado Federico Arregui, interpuso un recurso de inconstitucionalidad de la ley que permite el aborto en determinadas causales, y que ha sido remitido a la Suprema Corte de Justicia.
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El hecho ocurrió en la ciudad de Mercedes, a cerca de 280 kilómetros de Montevideo, en Uruguay donde el aborto está despenalizado hasta las 12 semanas de embarazo.
Según explicó Arregui al diario El País, el demandante mantuvo una relación amorosa con la demandada. Ahora ya no son pareja. El 25 de enero la mujer le dijo que estaba llevando a cabo los trámites para someterse a un aborto y él trató de hacerla desistir.
Sin embargo, según el abogado, "resultó infructuoso, en cuyo mérito decidió activar los mecanismos legales tendientes a la protección de la vida del hijo en común".
Arregui afirmó que el demandante "está dispuesto plenamente a hacerse cargo de su hijo, lo cual hace ya a partir de la concepción, independientemente de que la madre esté dispuesta a ejercer su rol como tal".
En su sentencia, la jueza a cargo del caso, Dra. Pura Concepción Book, señaló que la demandada argumentó que "tiene un rechazo natural al embarazo".
"Yo no tengo ganas de estar embarazada ni soportar que me obliguen, conociendo mis derechos que me otorga la ley pude acceder al derecho de iniciar el trámite y hacerlo", sostuvo la mujer.
"Aparte de lo natural que no tengo ganas todo lo que es ámbito social, económico, laboral, sicológico todo eso me lleva a ratificar la idea de no tenerlo", agregó.
Luego de escuchar los argumentos a favor y en contra, la jueza determinó que la mujer no cumplió con todos los requisitos que establece la ley, específicamente el artículo 3 que indica que debe informar al médico las circunstancias que le impedirían continuar con el embarazo.
Por esta razón, el 21 de febrero, la magistrada ordenó la suspensión del procedimiento de "interrupción del embarazo" (aborto) que iba a realizar la mujer, que está en la décima semana de gestación.
La decisión de la jueza Book fue altamente cuestionada por los grupos abortistas de Uruguay, pero respaldada en unanimidad por la Asociación de Magistrados y el Colegio de Abogados, que recordó varios principios de la Carta de Naciones Unidas sobre la independencia judicial.
"No se efectuarán intromisiones indebidas o injustificadas en el proceso, ni se someterán a revisión las decisiones de los tribunales", afirma el comunicado de la Asociación.
Asimismo agregan que "toda acusación o queja formulada contra un juez por su actuación se tramitará según el procedimiento pertinente" y "no cumplir un fallo judicial firme por parte del Poder Ejecutivo, colide contra los principios de tutela jurisdiccional, igualdad y seguridad que asientan nuestro Estado de Derecho".
La decisión también fue aplaudida por los líderes provida, como el diputado Carlos Lafigliola, quien dijo a El País que se trata de "una sorpresa muy grata", ya que por primera vez se pone al padre como sujeto de derecho ante el niño en gestación.
"Es el primer fallo en este tema que nos da la razón, y por eso es un gran impulso para fortalecer el trabajo. Es un fallo histórico. Un fallo que nos llena de esperanza", subrayó.
Corrección al 28 de febrero a las 3:55 p.m. GMT -5: Una versión previa de este artículo señalaba que la distancia entre Mercedes y Montevideo era de 766 kilómetros.
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- ACI Prensa (@aciprensa) 19 de enero de 2017