El grupo terrorista "Combatientes Islámicos por la Libertad de Bangsamoro", leal al Estado Islámico, asaltó y destruyó este jueves en Filipinas una capilla católica y una escuela primaria, donde tomaron como rehenes a 31 personas, entre ellas a 12 niños, que ya han sido liberados.

Después de más de 10 horas de duro combate, el Ejército filipino logró doblegar a las fuerzas terroristas y recuperar el control de la escuela y de la capilla situadas en Pigcawayan, ciudad de la Arquidiócesis de Cotabato con población tanto cristiana como musulmana, perteneciente a la isla de Mindanao.

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

Según informó un portavoz militar, el ataque estuvo protagonizado por un grupo de entre 50 y 100 terroristas que huyeron tras el enfrentamiento con los militares filipinos.

 

 

El Arzobispo de Cotabato, Cardenal Orlando Quevedo, condenó el ataque de los Combatientes Islámicos por la Libertad de Bangsamoro y, en concreto, definió como una "malvada profanación" la destrucción de la capilla.

"Como líder de la Archidiócesis de Cotabato, condeno de la forma más contundente posible la malvada profanación de la capilla católica de Malagakit, en la parroquia de Pigcawayan, y de forma especial, la profanación de la Sagrada Hostia".

El Cardenal pidió a los católicos locales que se impliquen en la restauración de la santidad de la capilla, y pidió que se rece por la restitución de la paz y de la armonía entre los creyentes de las diferentes religiones. 

El Ejército de Filipinas está realizando desde hace un mes una campaña militar para derrotar y desalojar de sus posiciones a los terroristas de este grupo leal al Estado Islámico que se han hecho fuertes en la ciudad de Marawi.

Por el momento, sin embargo, no han conseguido alcanzar sus objetivos.

También te puede interesar: