La sentencia de apenas 18 meses de prisión por once delitos de abortos ilegales en el Caso Morín, el más grave presentado en cortes españolas, revela la impunidad de este crimen en el país, denunció el ex presidente de la Federación Internacional de Médicos Católicos, José María Simón Castellví.
La Sección 6 de la Audiencia de Barcelona (España) condenó el 17 de junio al médico Carlos Morín y al psiquiatra Pascual Javier Ramón Mora a 18 meses de prisión por once delitos de abortos ilegales en varias clínicas españolas.
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Spain's 'Abortion King' Carlos Morín goes to trial again for illegally killing dozens of… https://t.co/vdgxK5o2dz pic.twitter.com/jwgxHS7diY
- C.T.M.S (@FiguroUSA) 5 de marzo de 2016
El caso comenzó en el año 2006 después de que varias asociaciones denunciaran la trama de abortos ilegales realizados por el Morín en sus clínicas. Para la Audiencia de Barcelona, Morín "sabía que con la actividad diseñada y organizada por él (exclusivamente) en las clínicas se van a cometer abortos sin cumplir con los requisitos", es decir, que hubiera grave riesgo para la salud física o psíquica de la embarazada o que el feto sufriera malformaciones, supuestos para los que la ley de 1985 despenalizaba el aborto hasta la semana 22.
Inicialmente se pedía más de 300 años de prisión para Morín por más de cien abortos ilegales.
Desde 2010, el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), despenalizó el aborto hasta las 14 semanas, con una ley que permite incluso a menores de 16 años acceder a esta práctica.
En la sentencia de hoy también se precisa que Morín es "autor mediato" de 11 delitos de aborto.
En declaraciones a ACI Prensa, el Dr. Simón Castellví lamentó que "la sentencia contra el colegiado Morín demuestra lo poco protegida que está en España la vida naciente".
"Después de años y años de escándalo mediático –abortos tardíos demostrados periodísticamente con cámara oculta– y actuaciones judiciales por irregularidades, le cargan una pena que no cumplirá", dijo.
Para el ex presidente de la Federación Internacional de Médicos Católicos, "matar a un ser humano en el vientre de su madre es impune en España. Lamentable. Y una gran responsabilidad para los que ansiamos el respeto por los frágiles".
Un tribunal español absolvió en 2013 a Morín, pero el Tribunal Supremo ordenó la repetición del juicio por estimar que la Audiencia de Barcelona no consideró como prueba un reportaje con cámara oculta a una de las clínicas de Morín, que originó la denuncia y el proceso judicial.
El Centro Jurídico Tomás Moro, una de las organizaciones que presentó las acusaciones contra Morín, saludó la sentencia pero advirtió que no cumple las expectativas por lo ligero de las penas.
Sin embargo, precisó en un comunicado, el fallo judicial los alienta "a seguir adelante en el control de las clínicas abortivas que incumpliendo la ley realizan abortos fuera de los supuestos establecidos legalmente".
Para el presidente del Centro Jurídico Tomás Moro, Javier Pérez- Roldán Suanzes, la meta es "lograr el aborto cero, dado que la vida ha de ser protegida desde el momento de la concepción hasta la muerte natural".
"Cualquier aborto implica el reconocimiento de las deficiencias de un Estado Social de Derecho que no sabe o no quiere tutelar el derecho de los más indefensos, a saber: los menores no nacidos y las madres desatendidas por un estado de bienestar que las deja abandonadas a su suerte", señaló.
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- ACI Prensa (@aciprensa) 29 de enero de 2016