El 15 de enero el Senado de Chile aprobó la idea de legislar el proyecto de ley de "matrimonio igualitario" y, como resultado, dio pie a la discusión en particular en la Comisión de Constitución.
El proyecto titulado "Modifica diversos cuerpos legales para regular, en igualdad de condiciones, el matrimonio de parejas del mismo sexo" fue aprobado con 22 votos a favor, 16 en contra y 1 abstención.
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El texto fue presentado en septiembre de 2017 durante el gobierno de Michelle Bachelet y acusa a la normativa actual que regula el Matrimonio Civil de ignorar las uniones del mismo sexo y dar a las personas homosexuales "un trato desigual, donde el Estado les señala que ese amor y ese compromiso no son iguales al de las parejas heterosexuales".
El proyecto busca modificar, entre otras normativas, el Código Civil, el Código del Trabajo y la ley de Acuerdo de Unión Civil que regula los efectos jurídicos de la convivencia entre parejas del mismo sexo y heterosexuales promulgado en abril de 2015 por Bachelet.
Entre las modificaciones está el reemplazo de los términos "el marido y "la mujer" por "el cónyuge" y "la cónyuge"; así como "los padres" por "progenitores".
Al momento de la votación del proyecto de ley, el senador Iván Moreira manifestó que "quienes tenemos posiciones valóricas cristianas creemos firmemente que el matrimonio debe ser entre un hombre y una mujer; así como defendemos que la vida comienza con la concepción y rechazamos conceptos como identidad de género y autonomía progresiva de la voluntad en los menores".
"Consideramos a la institución del matrimonio como el espacio natural para el cuidado y la generación de la vida es su fin esencial. Así como el cuidarse protegerse y amarse uno por el otro por el resto de la vida terrenal", agregó Moreira.
El senador por la Unión Demócrata Independiente (UDI) exigió "respeto por nuestra visión y la de millones de chilenos que piensan que el matrimonio no es un contrato más, sino una institución única y fundamental que por su naturaleza se debe preservar con el vínculo entre un hombre y una mujer".
En ese sentido, agregó que por defender esta postura la "izquierda" tiene una "peligrosa tendencia a conductas totalitarias de absoluta intolerancia con el que piensa distinto" y los cataloga de "homofóbicos o agentes de la intolerancia religiosa".
"Las convicciones no pasan por un voto más o un voto menos o lo que pueda ser una mayoría circunstancial", señaló.
"Hoy es un miércoles negro, hoy quien pierde es nuestra sociedad a la cual tenemos que fortalecerla en sus valores y principios. Hoy pierde el alma y el espíritu de una parte importante de nuestra sociedad. Y nosotros seguiremos defendiendo esos principios y valores con fuerza y dignidad", concluyó el senador Moreira.
