San Patricio, patrono de Irlanda, es uno de los santos más populares, ya que fue obispo y gran misionero. Sin embargo, pocos saben que uno de sus grandes legados es su carta testimonial sobre la esclavitud y que en una ocasión emitió una sincera súplica en nombre de niñas y niños secuestrados para ser esclavizados.
En la “Carta a los soldados de Coroticus”, San Patricio pretendía avergonzar a Coroticus, un general del siglo V, cuyos soldados, en palabras del santo, estaban “manchados de sangre, con la sangre de cristianos inocentes, cuyo número he dado a luz en Dios y confirmado en Cristo”.
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Además, denunció que los soldados “se repartían a las indefensas mujeres bautizadas como premios” y dijo que no sabía qué lo entristecía más: los muertos, los capturados o los mismos esclavizadores, “aquellos a quienes el diablo atrapó tan profundamente”.
La carta de San Patricio es aún más conmovedora porque dijo que fue un antiguo esclavo. Relató que asaltantes irlandeses lo raptaron y masacraron a los hombres y mujeres que trabajaban como sirvientes en la casa de su padre.
Jennifer Paxton, profesora de historia que enseña en el programa de Estudios Irlandeses de la Universidad Católica de América, indicó a CNA, agencia en inglés de EWTN News, que el santo “habría sabido muy bien por lo que estaban pasando estos esclavos, porque fue víctima de tal redada”.
Explicó que “en el siglo V, este tipo de incursiones era endémico en todas las islas británicas. Lo robaron de algún lugar, no estamos seguros de dónde, en el oeste de Gran Bretaña, y lo llevaron cautivo a Irlanda”.
Durante su cautiverio, San Patricio pasó seis años cuidando ovejas para su amo.
“Obviamente, no disfrutó de su tiempo como esclavo y quería que terminara. Así que definitivamente se habría identificado con estas víctimas”, agregó.
Paxton subrayó la importancia histórica de la carta de San Patricio, pues es un testimonio único en la historia medieval. “No tenemos ningún otro relato en primera persona de alguien que fue capturado por bárbaros y sobrevivió. No tenemos nada parecido”.
Además, destacó que la carta de San Patricio y su otra obra llamada “La Confesión de San Patricio”, están “impregnadas de las Escrituras” y que “básicamente, escribe en citas de las Escrituras". "Esa es la forma en que piensa Patricio”, acotó.
Al respecto, recordó que el uso de la Biblia que hizo San Patricio en su carta es inusual en un texto medieval, porque cita muchas secciones diferentes de la Biblia como los Evangelios, los Hechos de los Apóstoles y numerosos libros proféticos.
La profesora de historia explicó que la carta fue escrita para ser leída en voz alta en otro lugar, con la esperanza de que Coroticus y sus hombres eventualmente se enteraran y se vieran bajo presión popular. Destacó que su estilo de escritura es “algo defensivo”, porque “se enfrenta a tremendos obstáculos y lo sabe”.
San Patricio aseguraba que aquellos que escuchen la carta no debían “adular a esas personas” y no debían compartir comida o bebida con ellos hasta que liberen a sus cautivos y “satisfagan a Dios con severas penitencias y derramamiento de lágrimas”, señaló la experta.
Además, comentó que el santo, “hasta donde sabemos, nunca recupera a estos cautivos”; sin embargo, “lo que tenemos es este cri de coeur [sincero y conmovedor llamamiento] que ha resonado a lo largo de los siglos. Pero no logra salvarlos”.
Sobre ello, Paxton especula que San Patricio debió haber sentido “la tragedia de ver a estas personas recién salvadas de la condenación por el bautismo, y [luego] llevadas a la esclavitud”.
Lamentó, además, que la carta de San Patricio donde solicita la liberación de esclavos no tuvo mucha circulación, sino que se conservó solo en algunos lugares, incluido el Libro de Armagh, un manuscrito irlandés conocido como el Canon de Patricio.
La profesora de historia manifestó que la carta tuvo un rol pequeño en los debates cristianos sobre la esclavitud, práctica que se dio por sentada durante siglos.
También precisó que el declive de la esclavitud en Europa no se debío mucho a los esfuerzos de la Iglesia, sino que “fueron más las fuerzas económicas que la llevaron a su declive, lamento decirlo”, y agregó que el propio Coroticus probablemente era cristiano.
La esclavitud moderna es un problema duradero. En Nigeria, donde San Patricio es santo patrono, el grupo militante islamista Boko Haram se hizo famoso por los secuestros en abril de 2014 de varios cientos de niñas de una escuela en el noreste del país.
En diciembre de ese mismo año, los principales líderes religiosos, incluido el Papa Francisco, firmaron una declaración conjunta en el Vaticano instando a la erradicación de la esclavitud moderna.
Aunque San Patricio no fue el primer misionero cristiano en Irlanda, es ampliamente considerado como el más exitoso, al punto de ser considerado santo patrono de Irlanda. El santo deja un gran legado y es fuente de inspiración para la Iglesia por su vida de sacrificio, oración y ayuno.
Para Paxton, San Patricio es “una figura realmente fascinante”, al punto que en leyendas posteriores se convirtió en un “superhéroe que hacía maravillas” como expulsar a las serpientes de Irlanda y derrotar a los druidas en la batalla. “Pero, el verdadero San Patricio de sus propias palabras es realmente un ejemplo mucho más conmovedor e inspirador para los cristianos de hoy”, agregó.
“Irlanda nunca fue la misma como resultado de lo que hizo. Creo que eso es algo que debería impresionarnos a todos, alguien que era muy marginal [y] que no era una figura importante en su propia Iglesia, perseveró frente a todos estos obstáculos y logró algo realmente maravilloso”, concluyó.
Traducido y adaptado por ACI Prensa. Esta nota fue publicada originalmente en CNA el 17 de marzo de 2021. Ha sido actualizada para su republicación.