Cada 18 de julio la Iglesia Católica celebra a San Arnulfo de Metz, obispo, santo de origen franco, conocido como el ‘patrono de la cerveza’.

Arnulfo vivió entre finales del siglo VI y la primera parte del siglo VII y se desempeñó como consejero e intendente del palacio merovingio de la antigua Austrasia (nombre con el que se designaba a la parte nororiental del reino Franco) hasta que abandonó la vida secular para abrazar la vida religiosa.

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La virtud y la cerveza 

San Arnulfo o Arnoldo (ambos nombres se usan indistintamente en español) es patrono de la cerveza y de los cerveceros. 

Sin embargo, como señalaba hace unos años el P. José de Jesús Aguilar, subdirector de Radio y Televisión de la Arquidiócesis de México, el mencionado patronazgo no debe ser entendido como “de la embriaguez o de los borrachos, porque eso no tiene nada de santidad”. “La embriaguez es parte del pecado de gula”, añadía el P. Aguilar.

Sobre las razones de este patronazgo, el P. Aguilar explicaba que “durante cierta época la gente utilizaba los ríos como basureros e incluso la gente lanzaba [a las aguas] cadáveres de personas y animales, por lo que tomar agua de los ríos llegaba a ocasionar la muerte”.

Por eso y “para prevenir enfermedades y la peste”, el santo, como parte de su ministerio, “predicaba sobre el peligro de tomar agua en tales circunstancias. Arnulfo recomendaba tomar cerveza porque en aquella región se elaboraba con mucha facilidad”, concluye el P. Aguilar. 

La virtud de la cerveza

Resulta interesante que el proceso de preparación de la cerveza -que incluye la fermentación de la cebada y la cocción en agua- fuera identificado como “saludable” en la antigüedad, en contraposición al consumo directo de agua que pudiera estar contaminada. 

En otras palabras, la intuición de San Arnulfo y los cerveceros de su época pudo haber salvado muchas vidas. 

Nada humano es ajeno a la Iglesia 

San Arnulfo fue un santo profundamente humano, preocupado por la salud espiritual de los fieles, así como de su salud corporal. Su vida, en muchos sentidos, tuvo poco de “extraordinaria” si se consideran los estándares de la época. En otro sentido, su vida resulta ejemplar y única. 

Nació en el año 580 en el seno de una familia acomodada en Mosela, un territorio que perteneció a los antiguos merovingios y hoy es parte de Austria .

En su juventud entró al servicio de la corte bajo Brunegilda, princesa visigoda, y el rey Teodoberto II, rey franco de Austrasia, quien lo incluyó en la lista regular de oficiales reales: fue comandante militar y tuvo seis provincias bajo su responsabilidad.

En el año 612 renunció a todos sus cargos y, pese a estar casado y tener dos hijos, fue autorizado para ingresar a la vida religiosa. Fue ordenado sacerdote y luego obispo de Metz, sede que ocupó por un acuerdo entre el poder civil y el eclesiástico. En el año 627 se retiró al monasterio de Remiremont (Francia), donde falleció el 19 de julio de 640, a los 57 años. 

El milagro de la cerveza

Un año después de su muerte, los pobladores de los alrededores del monasterio pidieron que su cuerpo fuera exhumado y llevado a su ciudad de Metz para enterrarlo en la iglesia local, en la que predicó a Cristo con todas sus fuerzas, y donde también habló de las virtudes de la cerveza.

Según la tradición, durante el viaje de traslado de los restos del santo -que resultó largo y agotador- los fieles a quienes se les encargó la tarea, muertos de sed, se detuvieron para comprar cerveza a un comerciante local, al lado del camino. Lamentablemente descubrieron que quedaba muy poca, menos de un barril para compartir, y, sin embargo, la cerveza alcanzó para satisfacer la sed de todos.

“A esto se le conoce como el milagro de la cerveza y es la razón por la que se considera a San Arnulfo el Santo Patrón de los cerveceros y la cerveza”, afirmó el P. Aguilar, quien alienta a los fieles a pedirle al santo que esta bebida "nunca sea consumida por los niños y siempre sea bebida con moderación".

Si deseas conocer más sobre San Arnulfo de Metz, te recomendamos el siguiente enlace: https://ec.aciprensa.com/wiki/San_Arnulfo_de_Metz.