El presidente de la Conferencia Episcopal de Polonia, Mons. Stanisław Gadecki, hizo un llamado a los miembros del Parlamento Europeo para que no aprueben el "informe Matic", documento que define al aborto como "un derecho humano".
"Hacemos un llamado a todos los diputados al Parlamento Europeo para que voten en contra del proyecto de resolución mencionado. También recordamos a los parlamentarios católicos que, en la situación en la que se votan documentos sobre derechos humanos fundamentales y valores no negociables, no pueden aceptar ningún compromiso, y deben oponerse claramente a tales iniciativas", indicó Mons. Gądecki, en un comunicado emitido el 22 de junio.
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El informe titulado "Sobre la situación de la salud y de los derechos sexuales y reproductivos en la Unión Europea, en el marco de la salud de la mujer" fue presentado en el Parlamento Europeo el pasado 21 de mayo por el político croata Predrag Fred Matic.
Aunque se desconoce la fecha precisa de la votación de este informe, se estima que podría ser en la sesión plenaria que se celebrará el 23 y 24 de junio. Las resoluciones del Parlamento Europeo no tienen un valor legal vinculante, sino que son una expresión que desde la Eurocámara se quiere dar a conocer.
Sin embargo, aunque su aprobación no significa que los Estados miembros están obligados a asumirlo, sí puede servir posteriormente para legitimar políticamente la acción en los países y, finalmente, producir esos efectos.
En su mensaje, Mons. Gądecki dijo que recibió con "profunda preocupación y asombro" la información sobre el informe Matic, ya que "el aborto es siempre una violación del derecho humano fundamental a la vida, tanto más repugnante cuanto que afecta la vida de las personas más débiles e indefensas".
"Es, por tanto, una manifestación de la discriminación más injusta. La mera legalización del aborto distorsiona profundamente la vida social, y mucho menos si se reconoce como un 'servicio de salud esencial'", acotó.
El presidente del Episcopado polaco subrayó que la competencia en materia de protección de la salud nunca ha sido transferida a la Unión Europea y, por lo tanto, es competencia exclusiva de los estados miembros.
En ese sentido, recordó que todas las actividades de la Unión Europea en esta materia deben "realizarse cumpliendo con las responsabilidades de los estados miembros en la definición de su política sanitaria y en la organización y prestación de servicios de salud y asistencia médica".
Mons. Gądecki afirmó que en el proyecto se citó información falsa, "como el momento de la protección de la vida en Polonia, y tergiversan el concepto de 'derechos sexuales y reproductivos' como una obligación internacional vinculante y un elemento de los derechos humanos".
"Además, utilizan un concepto distorsionado de los derechos humanos, sugieren no solo que existe el 'derecho al aborto', sino que también es uno de los derechos humanos reconocidos. Ninguno de los documentos internacionales de derechos humanos menciona la existencia de este derecho, incluidos los documentos citados por los autores de las resoluciones", criticó.
Entre los documentos a los que hizo referencia Mons. Gądecki, están el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Social y Cultural, la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación de la Mujer y la Convención Europea de Derechos Humanos.
En otro punto, el Arzobispo polaco señaló que los autores de la resolución no solo niegan el derecho a la vida, sino también el segundo derecho humano fundamental, que es el derecho a la libertad de conciencia "garantizado por el art. 10.1 de la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE".
"Hay que decir que la Unión Europea en la Carta de los Derechos Fundamentales menciona explícitamente el derecho a la objeción de conciencia, que es una característica peculiar de esta organización. El derecho a la objeción de conciencia, incluido el del personal médico, está expresamente garantizado en las constituciones de muchos Estados miembros. Por lo tanto, la adopción de la resolución también podría considerarse un ataque a las constituciones de muchos estados miembros", subrayó en el comunicado.