El Patriarca de Moscú, Kirill, recibió al Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Pietro Parolin, en la sede del Patriarcado local en un encuentro en el que se trataron temas como las relaciones ecuménicas entre la Iglesia Ortodoxa Rusa y la Iglesia Católica, la guerra en Ucrania; y el conflicto en Medio Oriente.
La conversación entre ambos se centró en un primer momento en la situación de Ucrania, que sufre desde hace años una guerra civil en la que Rusia y las potencias de la OTAN han ejercido su influencia.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
El Secretario de Estado Vaticano hizo hincapié en que "las iglesias locales deben mostrar su potencial pacificador y contribuir con todos sus medios disponibles a reestablecer la paz y la concordia entre los civiles del país".
Kirill, por su parte, recordó que "la iglesia no puede jugar ningún papel que no sea el de la pacificación cuando las personas están en conflicto entre ellas. Apreciamos mucho el hecho de que también en esta ocasión hayamos encontrado una comprensión recíproca sobre el papel que deben desempeñar nuestras Iglesias en favor de la reconciliación de la población en Ucrania".
En la conversación también se trató el tema de la paz en Oriente Medio. El Cardenal Parolin subrayó que la angustia de los cristianos, y de otras minorías religiosas, en la región "debe remover la conciencia de la comunidad internacional, e incitar a las Iglesias a mejorar la situación humanitaria".
El Patriarca Kirill comentó al respecto que "la colaboración entre la Iglesia Ortodoxa y la Católica en la ayuda humanitaria a la población que sufre por los conflictos en Oriente Medio puede ser un importante factor de unión".
Asimismo, durante el encuentro, el Patriarca Kirill destacó como "un evento excepcional para la historia de nuestras Iglesias" el traslado de las reliquias de San Nicolás de Bari desde Italia a Rusia.
Los restos de este santo patrón de Rusia, Grecia y Turquía, se veneraron del 21 de mayo al 28 de julio en Moscú y en San Petersburgo antes de su regreso a la ciudad de Bari, en Italia, donde se custodian.
Según reveló el Patriarca ruso, durante ese período más de 2 millones 300 mil fieles veneraron las reliquias. Por su parte, el Secretario de Estado de la Santa Sede valoró muy positivamente la presencia de los restos de San Nicolás de Bari y resaltó este hecho en el contexto de las buenas relaciones entre ortodoxos y católicos.
El Cardenal Parolin señaló que "el ecumenismo de la santidad es verdadero, existe. Los santos nos unen porque son los más cercanos a Dios y, por lo tanto, son ellos los que nos ayudan a superar las dificultades de las relaciones del pasado debido a situaciones precedentes, y a caminar siempre de manera más firme hacia el abrazo fraterno y la comunión eucarística".
Sobre las relaciones ecuménicas, el Cardenal Parolin destacó la nueva etapa que se abrió en las relaciones entre la Iglesia Ortodoxa Rusa y la Iglesia Católica a raíz del encuentro que el Papa Francisco y el Patriarca Kirill mantuvieron en Cuba en febrero de 2016.
Para el Secretario de Estado, la presencia de las reliquias de San Nicolás de Bari en Rusia "aceleró los avances en nuestras relaciones".
"Me alegra ver la importancia de ese evento, de su recepción en la Iglesia Ortodoxa Rusa. Estoy contento de los resultados. Podemos decir que uno de los resultados logrados por las reliquias es el establecimiento de una nueva atmósfera que nos ayuda a compartir y a avanzar", expresó.
El Cardenal Pietro Parolin también transmitió al Patriarca Kirill el saludo personal del Papa Francisco: "Saluda a mi hermano Kirill, Patriarca de Moscú y de todas las Rusias". El Patriarca agradeció el gesto en italiano: "grazie".
También te puede interesar:
Cardenal Parolin invita a revivir la relación con Dios y a no ser unos “desmemoriados” https://t.co/7xqcn8UxTY
- ACI Prensa (@aciprensa) 20 de agosto de 2017