El Papa Francisco explicó algunas de las razones por las que no aprobó a los viri probati (varones de probada virtud) como sacerdotes casados, luego del Sínodo de los Obispos sobre la Amazonía realizado en el Vaticano en octubre de 2019.
En apuntes compartidos con la revista jesuita "La Civiltà Cattolica", publicados este jueves 3 de septiembre, el Santo Padre escribió que sobre los viri probati "hubo una discusión, una discusión rica, una discusión bien fundamentada, pero ningún discernimiento, que es algo distinto a llegar a un buen y justificado consenso o mayorías relativas".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
La propuesta de ordenar hombres casados está en el párrafo 111 del documento final del Sínodo. Este párrafo recibió 128 votos a favor y 41 en contra, siendo el numeral que más desaprobaciones recibió en todo el texto.
"Considerando que la legítima diversidad no daña la comunión y la unidad de la Iglesia, sino que la manifiesta y sirve (LG 13; OE 6) lo que da testimonio de la pluralidad de ritos y disciplinas existentes, proponemos establecer criterios y disposiciones de parte de la autoridad competente, en el marco de la Lumen Gentium 26, de ordenar sacerdotes a hombres idóneos y reconocidos de la comunidad, que tengan un diaconado permanente fecundo y reciban una formación adecuada para el presbiterado, pudiendo tener familia legítimamente constituida y estable, para sostener la vida de la comunidad cristiana mediante la predicación de la Palabra y la celebración de los Sacramentos en las zonas más remotas de la región amazónica. A este respecto, algunos se pronunciaron por un abordaje universal del tema", señala el párrafo 111.
En sus apuntes el Papa Francisco indica que "debemos comprender que el Sínodo es más que un Parlamento; y en este caso específico no podía escapar a esta dinámica. Sobre este argumento fue un Parlamento rico, productivo e incluso necesario, pero no más que esto".
"Para mí esto ha sido decisivo en el discernimiento final, cuando he pensado cómo hacer la exhortación" apostólica postsinodal Querida Amazonía, resaltó el Papa Francisco en sus apuntes.
El Santo Padre indicó que "una de las riquezas y la originalidad de la pedagogía sinodal está en salir de la lógica parlamentaria para aprender a escuchar, en comunidad, lo que el Espíritu dice a la Iglesia, por esto propongo siempre callar luego de un cierto número de intervenciones" durante el debate en el aula sinodal.
"Caminar juntos significa dedicar tiempo a una escucha honesta, capaz de revelarnos y desenmascarar (o al menos ser sinceros) la aparente pureza de nuestras posiciones y ayudarnos a discernir el trigo que –hasta la Parusía– crece siempre en medio de la mala hierba. Quien no ha realizado esta visión evangélica de la realidad se expone a una amargura inútil. La escucha sincera y orante nos muestra las 'agendas escondidas' llamadas a la conversión. ¿Qué sentido tendría la asamblea sinodal si no fuese para escuchar juntos lo que el Espíritu dice a la Iglesia?".
Al finalizar, el Papa Francisco dice que "me gusta pensar que, en cierto sentido, el Sínodo no ha terminado. Este tiempo de acogida de todo el proceso que hemos vivido nos desafía a seguir caminando juntos y a poner en práctica esta experiencia".
El 12 de febrero de 2020 el Vaticano publicó la exhortación apostólica postsinodal Querida Amazonía, del Papa Francisco, fruto del Sínodo de la Amazonía. El documento magisterial no contempla la posibilidad de ordenar hombres casados.