El Administrador Apostólico de Osorno (Chile), Mons. Jorge Concha Cayuqueo, expuso seis temas que se deben considerar en la redacción de la nueva Constitución.
El 15 de noviembre, los parlamentarios de todas las bancadas, excepto el Partido Comunista y la Federación Regionalista Verde Social (FRVS) anunciaron un acuerdo para redactar una nueva Constitución que reemplace la promulgada por el régimen militar de Augusto Pinochet en 1980.
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Esta solicitud ha sido uno de los pilares de las manifestaciones sociales, junto a otras demandas para mejorar las políticas públicas que permitan una vida digna para todos.
Para lograr esto los parlamentarios propusieron realizar un plebiscito ciudadano en abril de 2020. La elección del equipo redactor del texto se realizará durante las elecciones municipales y de gobernadores regionales el 25 de octubre de 2020.
Luego, para ratificar la nueva Constitución habría un nuevo plebiscito en 2021.
Mons. Concha Cayuqueo dijo que el acuerdo alcanzado "puede ser trascendental a corto y largo plazo en la convivencia de todos y en el destino de Chile".
"En lo inmediato, puede ayudar a descomprimir el actual momento que estamos viviendo, de mucha violencia, que ciertamente pone en grave peligro la paz, la democracia, el trabajo, la integridad de las personas y de sus bienes y de todo el estado de derecho que es necesario", agregó.
En ese sentido, explicó que la Carta Fundamental de Chile debe estar "acorde a los tiempos actuales, con una consideración adecuada a la actual realidad de los chilenos y chilenas, a su visión de la realidad, a sus frustraciones y a sus esperanzas, y que marque la vida de todos con nuevos estándares para los próximos decenios".
Como primer punto a tratar, el Obispo consideró que la nueva Constitución "debe garantizar este derecho fundamental de la libertad de culto, de reunión, de organización y de expresión de las convicciones religiosas y el derecho a poder nutrir la conciencia a partir de tales convicciones".
Asimismo, debe garantizar la libertad de enseñanza y la "libertad para que las familias puedan elegir la enseñanza de sus hijos".
En otro punto que el texto debe considerar es la "preservación y el cuidado de la casa común, el cuidado del medio ambiente y de la biodiversidad; en este tema se debería dar pasos muy importantes y que no están en la actual Constitución".
Asimismo, "el necesario reconocimiento y autonomía de los pueblos originarios de nuestra patria", ya que "en Chile estamos muy atrasados y es la oportunidad para dar grandes pasos al respecto y en forma civilizada".