El Arzobispo de Los Ángeles, Mons. José H. Gómez, ordenó a tres nuevos obispos auxiliares que colaborarán con él en el servicio de la arquidiócesis más grande de Estados Unidos.
Los tres nuevos obispos auxiliares son Mons. Robert Barron, Mons. David O'Connell y Mons. Joseph Brennan.
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La arquidiócesis de Los Ángeles tiene unos cinco millones de católicos y alrededor de 280 parroquias. Con los nuevos prelados, cuenta ahora con siete obispos auxiliares que colaborarán con Mons. Gómez.
Antes de su ordenación episcopal Mons. Barron era rector y presidente del Seminario de Chicago en la Universidad de St. Mary of the Lake. Este nuevo Prelado es popular en Estados Unidos por su iniciativa Word on Fire Catholic Ministries y también por haber producido el documental llamado Catolicismo.
Los otros dos nuevos Obispos ya servían en Los Ángeles. El Obispo O'Connell proviene de County Cork, Irlanda. Fue ordenado sacerdote en 1979 y desde hace un tiempo se dedica a un apostolado que busca acabar con la violencia en Los Ángeles. También ha colaborado en el comité de la arquidiócesis dedicado a la inmigración.
Mons. Brennan, por su parte, fue ordenado sacerdote en 1980 y ha trabajado como moderador para la Curia en la arquidiócesis.
En la homilía de la Misa de ordenación el 7 de septiembre en la Catedral de Los Ángeles, el Arzobispo Gómez dijo a los nuevos prelados que "como obispos son siervos de la esperanza. Y siempre se sirve mejor dando el mejor de los ejemplos".
También les animó a "ser muy cercanos a la gente" especialmente con los pobres, los más necesitados y los débiles. "Conozcan las alegrías, esperanzas y preocupaciones de vuestra gente. Hablen a sus corazones y llénenlos de esperanza", exhortó.
Les pidió que prediquen con el ejemplo "la alegría que viene de conocer el amor de Dios y su plan para la creación y la historia".
En la homilía el Arzobispo de Los Ángeles reflexionó sobre el evangelio de día en el que Jesús pide a os cristianos ser sal y luz del mundo. "Hermanos, 'ustedes son la sal de la tierra'. Recordad siempre de donde vienen, nunca piensen que ser obispo los hace ser mejores o más que otros". Ser Obispo, afirmó, es un "privilegio de servicio" y no un "privilegio de status".
"Están llamados a llevar la Cruz de Cristo y ser testigos de su Resurrección. Están llamados a dar vuestra vida como don por los otros como Cristo hizo".
"La misericordia es el rostro de Dios. Por eso la misericordia debe ser precisamente el camino de nuestro ministerio como Obispos", precisó luego.
El Arzobispo de Los Ángeles recordó asimismo que la ordenación episcopal se realizó el día de la Natividad de María y por ello los animó a los tres nuevos obispos a "intensificar y profundizar en su amor a la Virgen".
Traducido por Blanca Ruiz, publicado originalmente en CNA
Papa Francisco explica las claves del buen Obispo http://t.co/HPB1IH9D6G
- ACI Prensa (@aciprensa) noviembre 5, 2014