Miles de personas participaron hoy en la Marcha por la Vida, en Madrid y otras 64 ciudades españolas, para exigir la repetidamente postergada reforma de la Ley del Aborto por parte del gobierno.
Recordando que cada día se producen 300 abortos en España, la Marcha, convocada por las plataformas Derecho a Vivir y Hazte Oír, demandó al presidente de gobierno Mariano Rajoy que reforme la actual Ley del Aborto, tal como ofrecieron en su programa electoral.
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En declaraciones para ACI Prensa, el presidente de Hazte Oír, Ignacio Arsuaga, señaló que en esta masiva manifestación pro-vida "le queremos decir al Gobierno que el voto no le va a salir gratis".
"Si quiere volver a ganar unas elecciones va a tener que escuchar a los votantes que le votamos porque él asumió el compromiso formalmente en el programa electoral de aprobar una ley de protección del concebido", dijo.
La Marcha por la Vida comenzó cerca de Gran Vía, una de las calles más significativas de la capital española, e hizo una parada delante del Ministerio de Justicia español -entidad que tendría entrampado el proyecto de reforma de la ley del aborto-, donde los manifestantes abuchearon y silbaron en contra del Gobierno.
Los organizadores recordaron que en su programa electoral de las elecciones de 2011, el Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy ofreció la reforma de la Ley del Aborto y reforzar el derecho a la vida.
Sin embargo, tres años después de su victoria en las urnas, el gobierno de Rajoy no ha modificado la ley, pese a que el Ministro de Justicia aseguró que la 'Ley de Protección de la Vida del Concebido' estaría aprobada este año, antes del final del verano del hemisferio norte.
La autodenominada 'Marea roja' debido al color de las camisetas, gorras y globos, terminó en una plaza con un escenario donde hubo diversos testimonios a favor de la vida de parte de familias, jóvenes y médicos.
Entre estos testimonios destacó el del doctor Luis Chiva, portavoz de 'Ginecólogos por la Vida' y padre de un hijo con Síndrome de Down.
El Dr. Chiva denunció que "con el aborto, en España, hemos asistido a un holocausto silencioso. El Gobierno del PP está perdiendo la poca autoridad moral que le quedaba. Que ya no cuenten con nosotros".
"No les votaremos de nuevo si no cumplen. Sin nosotros, perderán las próximas elecciones".
También contó su experiencia Camila Lugones, una joven que quedó embarazada un mes antes de cumplir 15 años y fue expulsada de su casa por querer seguir adelante con el embarazo. Ella vivió en un piso de acogida promovido por la Fundación Madrina que le permitió tener a su hija Ágata y también reconciliarse con su familia.
Desde el escenario se hicieron conexiones en directo con otras ciudades españolas, donde los ciudadanos también salieron a la calle para defender el derecho a la vida.
Los organizadores de la marcha anunciaron que ésta no será la última protesta si el Gobierno sigue paralizando la reforma de la actual legislación sobre el aborto.
Al finalizar el evento, una voluntaria de Derecho a Vivir leyó un Manifiesto donde pidió nuevamente al Gobierno la reforma de la Ley del Aborto, demandó que no se destinen fondos públicos para subvencionar abortos y reclamó más apoyos a la maternidad.
Haciendo un paralelo con el popular "efecto Mariposa", teoría que señala que un mínimo movimiento puede generar un gran cambio, un grupo de voluntarias alentó a considerar que aunque el movimiento pro-vida pueda parecer pequeño su impacto a nivel mundial puede ser arrollador. Tras esto, soltaron hacia el cielo de Madrid decenas de mariposas que volaron junto a globos rojos que portaban el mensaje de "Derecho a Vivir".