El P. Sergio Buiza es el director nacional de la Pastoral del Sordo de la Conferencia Episcopal Española y celebra la Misa en lengua de signos en la Iglesia Catedral del Señor Santiago en Bilbao (España). Según explica a Europa Press su objetivo es "llevar el Evangelio al máximo número de personas", por supuesto también a los sordos y ciegos.
En España hay alrededor de un millón de personas afectadas por distintos niveles de sordera. De ellas, unas 1.250 acuden a Misa en lengua de signos cada semana a alguna de las 24 iglesias donde se celebran.
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La Iglesia trabaja con las personas sordas desde hace más de 50 años y lo hace de forma más coordinada desde los años 90 del siglo pasado, cuando la Pastoral del Sordo entró a formar parte del organigrama de la Conferencia Episcopal.
En España unas 173 personas se dedican a la pastoral del sordo: 140 laicos, de los cuales 40 son sordos, nueve consagrados de los que dos son sordos; tres seminaristas y 21 sacerdotes, de los cuales tres son sordos.
En las 24 parroquias donde se realiza esta pastoral se ofrecen todos los servicios: desde Misas hasta catequesis, grupos bíblicos, celebración de bodas o confesiones. Sin embargo el P. Buiza explica que el principal problema es la dispersión, ya que suele haber tan sólo una parroquia por diócesis y no todas las personas sordas viven en torno a ella.
"Hay personas mayores que hacen largos trayectos. En mi diócesis celebramos la Eucaristía en la Catedral todos los sábados por la tarde y vienen de diferentes pueblos en tren y autobús", apunta este sacerdote de Bilbao.
Desde la Conferencia Episcopal, el pasado diciembre anunciaron que, en colaboración con la Fundación ONCE, instalarían en unas 12 iglesias de toda España bucles magnéticos para que las personas con discapacidad auditiva pudieran seguir la Misa. Los bucles magnéticos son un sistema de sonido que transforma el audio en un campo magnético que captan los audífonos. Sin embargo, estos bucles no servirán a las personas sordas sino solo a aquellas con problemas de audición.