Los jóvenes en Roma rezaron por la intercesión de San Juan Pablo II en la última semana del Sínodo de los Obispos 2018.
Con ocasión de la fiesta de San Juan Pablo II se realizó el 22 de octubre una Hora Santa en la que también se meditaron sus reflexiones del Evangelio en la iglesia de San Lorenzo en Piscibus, lugar al que el Pontífice pidió transformar en un centro juvenil internacional en la década de 1980.
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El centro de San Lorenzo se encuentra a pocos pasos de la Plaza de San Pedro. Sirve a jóvenes romanos y peregrinos. El centro juvenil también alberga la cruz original de la Jornada Mundial de la Juventud.
"San Juan Pablo II nos dijo: 'No tengan miedo'. Nos dijo: 'Tú eres el futuro'. Ahora es el futuro, y recordamos todo lo que nos enseñó. La juventud, los jóvenes que cantaron esta noche, tienen preguntas sobre la eternidad", dijo a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI– Mayda Rojas, quien ayudó a organizar la Hora Santa con la organización mundial de jóvenes World Youth Alliance.
Algunos padres sinodales, entre ellos el Arzobispo de Durban (Sudáfrica), Cardenal Wilfrid Fox Napier, y el Arzobispo húngaro griego, Mons. Péter Fülöp Kocsis, se unieron a los jóvenes en su vigilia de oración.
Entre las meditaciones hubo un extracto de "Cruzando el umbral de la esperanza", el libro-entrevista de San Juan Pablo II:
"¿Qué es la juventud? No es solo un período de vida que corresponde a un cierto número de años, sino que también es un tiempo que la Providencia otorga a cada persona y que se le asigna como responsabilidad. Durante ese tiempo busca, como el joven del Evangelio, respuestas a preguntas básicas; no solo busca el significado de la vida, sino también una forma concreta de vivir su vida. Esta es la característica más fundamental de la juventud".
"Cada mentor, comenzando con los padres, y mucho más cada pastor, debe conocer esta característica y debe saber cómo identificarla en cada niño y niña. Diré más: debe amar este aspecto fundamental de la juventud", respondió entonces el Papa al periodista Vittorio Messori.
Finalmente, Rojas resaltó que "los jóvenes están muy interesados en saber sobre la vida de un misionero", pero "no quieren la manera fácil, quieren conocer la experiencia real".
"Queremos que todos estos jóvenes y obispos recuerden que sabemos cuál es la respuesta: Jesucristo es la respuesta a todo", concluyó Rojas.
Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en CNA.
