A través de un comunicado, la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) lamentó la muerte de las 30 personas a causa de un alud de tierra y las constantes lluvias en la zona rural de Rosas, en el departamento de Cauca, ocurrido durante la mañana del Domingo de Pascua.

El Presidente de la CEC, Mons. Oscar Urbina Ortega; y el Secretario General, Mons. Elkin Fernando Álvarez Botero, ofrecieron sus plegarias por el eterno descanso de los fallecidos y por las víctimas que sufren las consecuencias de este desastre.

Los prelados hicieron un llamado a la solidaridad del pueblo colombiano, recordando que es "tiempo de que elevemos nuestra oración por ellos y nuestro auxilio efectivo", a través de los canales que indiquen las respectivas diócesis.

Asimismo, lamentaron la situación de los damnificados por las inundaciones en distintas regiones del país, cuyas viviendas fueron sepultadas por los deslizamientos de tierra.

La CEC también expresó su cercanía a Mons. Luis José Rueda Aparicio y a Mons. Orlando Olave Villanoba, presbíteros, religiosos y fieles laicos de las diócesis de Popayán y de Tumaco, que también fueron afectadas por el desastre.

"Seamos presencia y acción de Cristo Resucitado para nuestros hermanos que sufren, asistiéndolos con verdadera caridad", finaliza el comunicado.