La Iglesia en Venezuela animó a los fieles a respetar la cuarentena social por la pandemia del coronavirus COVID-19 y los invitó a unirse a una jornada intensa de oración el 19 de marzo.
La Conferencia Episcopal Venezolana emitió un comunicado el 15 de marzo para exhortar a los fieles a respetar la cuarentena social decretada por el Ejecutivo en siete estados del país y expresó su completa disposición a ayudar a la nación, después de haberse detectado 17 casos de coronavirus en muy poco tiempo.
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Debido a la crisis de Venezuela, los sectores médicos, de enfermería, ONG, organizaciones internacionales y el Parlamento democrático han advertido que los hospitales públicos se encuentran en situación de emergencia, pues sus instalaciones están deterioradas, no tienen insumos y no cuentan con servicio de agua en el 30% de los casos, señaló el diario español El Mundo.
Dada la gravedad social, el Episcopado recomendó que todos los ciudadanos acaten las directrices del Gobierno que exige permanecer en los hogares, considerando que se han suspendido los trabajos, las clases escolares y todas las manifestaciones públicas, como los actos de culto de todas las religiones.
Siguiendo esta disposición, la Iglesia en Venezuela ha pospuesto todas las actividades de carácter formativo y catequético, así como las procesiones, fiestas patronales, peregrinaciones y actos religiosos. Además, "tomamos la dolorosa decisión de suspender todos los actos litúrgicos, incluida la celebración eucarística hasta nuevo aviso", señaló
Estas medidas "apuntan al bien común y a la defensa de la salud de todos sin excepción", dijo el Episcopado y precisó que "sólo se celebrarán las exequias y el sacramento de la unción de los enfermos" y que cada obispo tomará las previsiones del caso en su diócesis y "dará las directrices particulares que considere oportunas".
La Iglesia en Venezuela también cooperará "con las autoridades sanitarias en todo lo que esté a su alcance y que vaya en beneficio de todos". Por ello, dispuso que Cáritas y todas las instituciones de ayuda y acción social de las parroquias que sirven alimentos y distribuyen medicamentos, ideen nuevas formas de servir evitando aglomeraciones.
"Se trata de un momento duro y una prueba de la cual hemos de salir victoriosos por nuestra fe y esperanza que han de expresarse en nuestra caridad y solidaridad", afirmó el Episcopado, y aseguró a la población que "el Señor está en medio de nosotros y no nos abandona. Él 'es la roca que nos salva'"
En consciencia de que la nueva pandemia representa una amenaza contra la salud del pueblo, el Episcopado instó a que la población siga las directrices y medidas, no por miedo a represalias "sino por el compromiso nacido del hecho de ser hermanos, hijos de Dios".
Asimismo, pidió a todas las autoridades que atiendan las necesidades de los venezolanos, garantizándoles "la protección necesaria, el respeto y el acceso a todos los recursos" necesarios como alimentos, agua, energía eléctrica, atención médica, etc., para una "sana convivencia".
La Presidencia del Episcopado también lamentó que "hay personas inescrupulosas que, valiéndose de la urgencia del momento, está especulando y subiendo de manera irracional precios de algunos insumos necesarios", y dio que es una "grave falta que debe ser rechazada por todos. Quienes así actúan no tienen temor de Dios".
Los medios de comunicación social y redes sociales serán los canales oficiales de las Diócesis para organizar "acciones evangelizadoras y momento de oración", dispuso el Episcopado, e invitó a todos los fieles a participar a una "intensa jornada de oración" el 19 de marzo "pidiendo a Dios la liberación de ese flagelo".
"Seguimos en las manos del Dios de la Vida y del Amor, quien desde la Cruz dio la liberación integral a toda la humanidad: que su Corazón amoroso detenga todo mal sobre nuestro país y nos permita salir pronto de esta emergencia", dijo el Episcopado, "nos encomendamos a la maternal protección de María de Venezuela, la Virgen de Coromoto", concluyó.