La Diócesis de Astorga (España), informó que ayer martes falleció a los 98 años Mons. Eloy Tato Losada, "el último obispo vivo que quedaba y que había participado en las cuatro sesiones del Concilio Vaticano II".
El deceso de quien también fue Obispo Emérito de Magangué (Colombia) ocurrió ayer 18 de enero a las 9:30 p.m. (hora local) en el Hospital de O Barco, donde había estado internado.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Con Don Eloy, se nos ha ido el último obispo vivo que quedaba y que había participado en las 4 sesiones del Concilio Vaticano II. Con él se nos ha ido un hombre de Dios, un hombre de fe profunda, caritativo, alegre y pacífico (…), generoso y pobre que no se reservó nada para sí", afirmó la Diócesis.
El Concilio Vaticano II fue el evento eclesial y mundial más importante del siglo XX. Lo impulsó el Papa San Juan XXIII para buscar el aggiornamento, es decir la actualización de la Iglesia para acercarla al mundo actual. Comenzó en 1962 y se dividió en cuatro etapas. Participaron alrededor de dos mil padres conciliares de todo el mundo.
El velatorio de Mons. Eloy Tato se realiza en el Tanatorio de Santa Rita, en la localidad de O Barco de Valdeorras (Ourense).
La Misa de exequias se celebrará el viernes 21, al mediodía en la iglesia de Santa Rita, en dicha localidad. Será sepultado en el cementerio de su localidad natal de Villadequinta.
Eloy Tato Losada nació en Villadequinta (Ourense), el 6 de septiembre de 1923, siendo el menor de cinco hermanos.
Estudió en el Seminario de Astorga y fue ordenado sacerdote el 15 de junio de 1946, con solo 22 años de edad.
Durante seis años sirvió en la zona gallega de la Diócesis de Astorga como ecónomo de Alberguería, y encargado también de las parroquias de Meda, Prada, Riomao, Curixido y Vilaboa, todas ellas pertenecientes al concejo ourense de A Veiga do Bolo.
El 8 de octubre de 1952 se incorporó al Seminario de Misiones en Burgos y, al año siguiente, se consagró definitivamente al Instituto Español de Misiones Extranjeras (IEME).
Fue enviado al Vicariato Apostólico de San Jorge en Colombia y se le nombró profesor en el Seminario Mayor del Vicariato. En 1956 fue nombrado rector y profesor de Teología del Seminario Mayor y cuasipárroco de San Benito Abad. Atendía también al Instituto Femenino de Damas Catequistas.
El 3 de mayo de 1960, cuando tenía solo 36 años, fue designado Vicario Apostólico de San Jorge, convirtiéndose en el obispo más joven del mundo. Su consagración episcopal se celebró en la Catedral de Astorga el 25 de julio de 1960.
El 25 de abril de 1969 fue designado primer Obispo de Magangué, diócesis en la que sirvió durante más de 25 años hasta el 31 de mayo de 1994, cuando renunció por motivos de salud.
Se retiró entonces a la pequeña aldea valdeorrense de Villadequinta "donde siguió apoyando la acción pastoral de la zona con la generosidad, alegría y paz que siempre destiló", indica la nota de la Diócesis de Astorga.