El gobernador de Carolina del Norte, Pat McCrory, se mantiene firme en su postura contra el decreto del Departamento de Justicia de Estados Unidos que declara ilegal y discriminatorio exigir que las personas utilicen baños públicos, vestidores y duchas según su sexo biológico.
"El derecho y la expectativa de privacidad en una de las áreas más íntimas de nuestra vida personal ahora está en peligro", afirmó el gobernador de Carolina del Norte.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Vamos a analizar la situación para determinar los pasos a seguir", expresó el gobernador como respuesta a una carta del Departamento de Justicia que considera que la reciente legislación de Carolina del Norte va en contra de las leyes de los derechos civiles nacionales.
Conocida como la ley HB2 (House Bill 2), el mandato aprobado por Carolina del Norte ordena que tanto en edificios públicos como escuelas, las personas usen los baños y vestidores según el sexo biológico que señala su certificado de nacimiento y no en base a la auto-percepción que tengan sobre su "identidad de género".
La carta del Departamento de Justicia no tiene un efecto jurídico, pero sí advierte una situación de riesgo de demandas. De no derogar la ley, Carolina del Norte podría perder millones de dólares en fondos federales para la educación.
Además de exigir una respuesta antes del 9 de mayo, el Departamento de Justicia también señaló que el estado no debía aplicar la ley HB2 por ir en contra del Título VII de la Ley de derechos civiles que impide la discriminación de carácter sexual.
La ley HB2 fue aprobada en marzo de 2016 como medio de bloqueo ante una ordenanza del Consejo de la ciudad de Charlotte -ubicada dentro de Carolina del Norte- que permitiría, entre otros aspectos, que las personas utilicen los servicios sanitarios en función de su percepción subjetiva de la "identidad de género".
Los partidarios de la ley HB2 aseguran que se trata de una protección con sentido común para hacer distinciones basadas en el sexo de una persona al momento de ir a lugares privados como baños y duchas.
Advierten preocupaciones respecto a la seguridad de las personas, ya que el decreto de Charlotte permitiría a cualquier varón biológico entrar a baños de mujeres, lo que aumentaría el riesgo de asaltos.
Luego de la aprobación de la ley HB2 más de 90 empresas líderes - entre ellas Google Ventures, Starbucks, Bank of America, Wells Fargo y Accenture - pidieron su derogación ya que "sancionaba la diferenciación".
Artistas desde Bruce Springsteen hasta el Cirque du Soleil cancelaron sus presentaciones en el estado y la NBA amenazó con cambiar el famoso evento All-Star Game 2017 fuera de Charlotte. Asimismo, el alcalde de San Francisco, Edwin M. Lee, emitió una orden que prohíbe a los empleados federales viajar a Carolina del Norte.
Ryan T. Anderson, experto en principios norteamericanos y políticas públicas del centro de investigación política The Heritage Foundation del instituto William E. Simon, sostuvo que la reacción en contra del proyecto de ley constituye "un 'amiguismo cultural"... por el cual las grandes empresas se coluden con el gobierno principal para conseguir sus propósitos".
"En este caso, las grandes empresas buscan lograr que el gobierno imponga sus valores culturales y su definición de sexualidad".
Anderson dijo a ACI Prensa que las ordenanzas anti-discriminación, entre ellas la orientación sexual e identidad de género, ahora se utilizan "para que cualquier persona que no las obedezca sea acusado de discriminación. Es una forma de eliminar la disidencia".
El experto también se refirió a la oposición de la población contra la ordenanza de permitir el acceso a los baños públicos según la identidad de género. En Carolina del Norte, el 69% estaba a favor de la derogación de la ordenanza de Charlotte, según una encuesta de Survey USA, patrocinada por el Civitas Institute. La ley HB2 obtuvo una aprobación de gran alcance en ambos partidos, con 83-25 en la Cámara de Representantes y 32-0 en el Senado.
"El pueblo estadounidense está a favor de las leyes que protegen la libertad religiosa y la seguridad de las mujeres y los niños en los baños públicos", dijo Anderson. "Las élites son quienes no lo están. Los funcionarios públicos necesitarán valor para no dejarse intimidar hacia la sumisión - ya sea por las élites corporativas, la de los medios de comunicación o las de Hollywood – con el fin de implementar políticas que preserven el bien común".
Traducido y adaptado por Bárbara Bustamante. Publicado originalmente en CNA.
También te puede interesar:
Ideología de género vacía el fundamento de la familia, dice el Papa en Amoris Laetitia https://t.co/TCf1Ikp2vr
- ACI Prensa (@aciprensa) 8 de abril de 2016