El Arzobispo de Nueva Orleans (Estados Unidos), Mons. Gregory Aymond, dio positivo por coronavirus, siendo el primer obispo estadounidense en contraer la enfermedad viral que ahora es una pandemia mundial.
"Recientemente tuve síntomas muy leves que incluyeron solamente fiebre. Por precaución, me hice la prueba de coronavirus que resultó positiva", anunció Mons. Aymond el 23 de marzo.
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"He notificado a aquellos con quienes he estado muy cerca. No hace falta decir que me he puesto en cuarentena para ser responsable y no afectar a los demás. Usaré este tiempo tranquilo para hacer oración y sacrificio adicionales por todos aquellos seriamente afectados por el virus", escribió el Arzobispo.
Finalmente añadió: "Ruego que me recupere pronto y continúe el ministerio. Mientras tanto, estaré presente a través de Facebook y el sitio web arquidiocesano con una reflexión sobre esta crisis y el poder curativo de Dios. Nuestra Señora de la Pronta Ayuda, ¡apúrate a ayudarnos! ¡Beato Seelos, ruega por nosotros!".
Mons. Aymond, de 70 años, es Arzobispo de Nueva Orleans desde 2009. Anteriormente fue Obispo de Austin y Obispo Auxiliar de Nueva Orleans.
Se sabe que al menos cinco sacerdotes estadounidenses tienen el virus. El viernes 20 de marzo un fraile franciscano se convirtió en el primer clérigo estadounidense conocido que murió del virus.
La OMS informó que los infectados por coronavirus superan las 372 mil personas. Más de 16 mil han muerto.
El 15 de marzo un sacerdote de la Diócesis de Yakima, Washington, fue el primer presbítero estadounidense en recibir un diagnóstico de COVID-19, y se anunció que un segundo sacerdote de Yakima tenía el virus el 23 de marzo.
El P. Stephen Planning, SJ, presidente de la escuela secundaria Gonzaga College de DC, anunció la semana pasada que también tiene el virus. Dos sacerdotes en la Diócesis de Brooklyn también fueron diagnosticados con el virus la semana pasada.
Ayer, el diario Avvenire, de la Conferencia Episcopal Italiana, publicó los nombres de 51 sacerdotes diocesanos que murieron después de contraer COVID-19, y señaló que las comunidades religiosas en Italia también habían reportado nueve muertes relacionadas con el coronavirus.
Se sabe que al menos un obispo italiano se está recuperando de la enfermedad.
La mayoría de los fallecidos tenían más de 70 años y algunos de estos sacerdotes tenían problemas de salud subyacentes.
Cada diócesis de rito latino en los Estados Unidos ha suspendido la celebración pública de la Misa y los edificios de la iglesia permanecen cerrados al público en muchos lugares. Las bodas, funerales y confirmaciones ha han sido suspendidas indefinidamente.
Varios estados han tomado medidas de emergencia para combatir la propagación del virus. California, Nueva York y Maryland han cerrado negocios no esenciales y alientan a las personas a permanecer en sus hogares. Antes de que le diagnosticaran el virus, Mons. Aymond convocó a un "Día de oración y ayuno" que tendrá lugar el 27 de marzo en su arquidiócesis.
"Dedique más tiempo a la oración buscando la curación y la compasión de Dios en esta crisis. Además, podemos ayunar de lo que queramos. Dígale al Señor que tenemos hambre: tengo hambre de usted más que hambre de comida, redes sociales, pasar tiempo con otros, etc.", escribió Mons. Aymond el 19 de marzo.
"Tenga la seguridad de mis oraciones diarias y un recuerdo en la Misa. Dios es fiel y, en su tiempo y a su manera, llegaremos a experimentar la curación y la paz. Debemos esperar pacientemente, lo cual no es tarea fácil", agregó el arzobispo.