Los fotógrafos del Vaticano captaron una peculiaridad en la muñeca del Papa Francisco: unas coloridas pulseras de goma con la imagen de San Juan Bosco y la Beata Eusebia Palomino. ¿El motivo? Las recibió como un regalo de un grupo de niños que se reunieron con el Pontífice en la mañana del 18 de julio.
En Italia, desde la década de 1960, se popularizó el uso de los colores del arcoiris para promover la paz en el mundo, especialmente ante la proliferación de armas nucleares. La Comunidad San Egidio, muy querida por el Papa, es una de las organizaciones católicas que ha tomado este importante símbolo como parte de su labor, especialmente a través de su campaña "El País del Arcoiris".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
El Santo Padre interrumpió su descanso vacacional y se dirigió al Aula Pablo VI para saludar a los niños que participan estos días en el campamento de verano organizado por el Vaticano.
Según informó la Santa Sede, el Papa Francisco pudo conversar con los jóvenes y responder a algunas de sus preguntas.
El Pontífice les animó a ser agradecidos con sus padres, a valorar a los abuelos -"los superhéroes que formaron una familia y que tienen sabiduría"- , y también les aconsejó tener una "sana relación con el mundo digital".
El Papa Francisco habla a los jóvenes junto al P. Fontana. Crédito: Vatican Media.
De este encuentro se difundieron tiernas imágenes donde se puede ver al Pontífice sonriente disfrutando del tiempo junto a los más pequeños.
El Papa Francisco junto a los jóvenes del campamento de verano del Vaticano. Crédito: Vatican Media.
De todas ellas, resalta una sobre el resto: se trata de una pulsera que lleva el Santo Padre con la imagen de San Juan Bosco y de la Beata Eusebia Palomino, salesiana española.
Los niños hicieron entrega al Papa de estas pulseras y de una "medalla" donde se puede apreciar un dibujo del Pontífice junto a la palabra "héroe" escrita en italiano.
El campamento, conocido como "Estate ragazzi" (Verano de los chicos), que ofrece talleres y formación para jóvenes, es un proyecto liderado por el P. Franco Fontana, sacerdote director de la comunidad salesiana dentro del Vaticano y capellán de la Gendarmería Vaticana.
El Centro de Verano se lleva a cabo en el Aula Paulo VI, del 3 de julio al 4 de agosto, y reúne a unos 250 participantes entre niños y adolescentes de 5 a 13 años.
Entre los formadores se encuentran tres salesianos y dos hijas de María Auxiliadora. Además, hay unos 20 jóvenes que participan como animadores y que ya han vivido anteriormente la experiencia del Centro de Verano salesiano en el Vaticano.
Por esta razón, una medalla de San Juan Bosco -fundador de los salesianos y patrón de la juventud- decora la peculiar pulsera entregada al Papa Francisco.
También se puede apreciar la imagen de Eusebia Palomino, la beata española que escuchó la voz de María Auxiliadora, tuvo visiones e incluso predijo la Guerra Civil española.
Esta no es la primera vez que se ve al Papa Francisco llevando una pulsera de estas características. Durante el Ángelus del pasado domingo 9 de julio pudimos apreciar una pulsera parecida en el momento en el que el Santo Padre saludó a los fieles que le escuchaban desde la Plaza de San Pedro.
El Papa Francisco en el Ángelus del 9 de julio. Crédito: Vatican Media
Por aquel entonces el campamento ya había empezado y quizá, de camino al Palacio Apostólico, el Papa se habría encontrado con uno de los muchachos que pasan los primeros días de este caluroso verano en el Vaticano.
Soy graduada en Periodismo y Publicidad por la Universidad CEU San Pablo de Madrid. Especializada en información religiosa en España desde 2015. He sido corresponsal senior de ACI Prensa y EWTN Noticias en el Vaticano durante dos años y actualmente soy corresponsal de Europa con base en España.
