El Papa Francisco ha analizado las relaciones de la Santa Sede con el Vaticano a su vuelta de Kazajistán afirmando que pese a que "hay una comisión bilateral Vaticano-China que va bien".
Preguntado por las relaciones entre la Santa Sede y el Gobierno chino, justo a las puertas del juicio contra el Obispo Emérito de Hong Kong, Cardenal Joseph Zen Ze-kiun, el Santo Padre dijo que "entender a China lleva un siglo. Y no vivimos un siglo".
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El Obispo Emérito de Hong Kong y otras cuatro personas serán juzgados a partir del 19 de septiembre por supuestamente no registrar correctamente un fondo de ayuda humanitaria a favor de la democracia del cual eran fideicomisarios.
A su juicio, "la mentalidad china es rica. Y cuando se enferma, pierde su riqueza y es capaz de cometer errores". Y, "para entender" el Papa puntualizó que "hemos elegido el camino del diálogo".
El Santo Padre consideró que "hay una comisión bilateral Vaticano-China que va bien. Lento, porque el ritmo chino es lento. Tienen una eternidad para seguir adelante". A su entender, se trata de "un pueblo de una paciencia infinita".
A continuación, el Papa valoró que "de las experiencias que tuvimos antes, pensamos en los misioneros italianos que fueron allí y fueron respetados como científicos. También pensamos hoy en muchos sacerdotes o personas creyentes que han sido llamados a las universidades chinas porque valoran la cultura".
"No es fácil entender la mentalidad china, pero hay que respetarla. Yo siempre respeto", apostilló el Papa, quien reiteró que "en el Vaticano hay una comisión de diálogo que va bien, está presidida por el Cardenal Parolin y es en este momento el hombre que más sabe de China y del diálogo con los chinos".
Sin embargo, reconoció que "es algo lento, pero siempre se están dando pasos hacia adelante".
El Papa Francisco añadió que "calificar a China de democracia o antidemocracia no me parece porque es un país muy complejo y con sus ritmos. Sí, es cierto que hay cosas que nos parecen antidemocráticas".
Sobre la situación del Cardenal Zen, el Santo Padre afirmó: "El Cardenal Zen es un hombre mayor, que tiene el juicio en estos días. ¿Creo, no? Y dice lo que siente".
A su juicio, "se ve que hay limitaciones", pero "más que calificar, porque es difícil, no me siento capaz de calificar. Estas son impresiones. Más que calificar, intento apoyar la vía del diálogo. En el camino del diálogo se aclaran muchas cosas", afirmó el Papa.
El Santo Padre afirmó que ese camino del diálogo es de aplicación en otros ámbitos más allá de la relación de China con la Iglesia Católica: "Por ejemplo, la extensión de China, los gobernadores de las provincias son todos diferentes, incluso hay diferentes culturas dentro de China... es un gigante".
"Entender a China es algo gigantesco pero no perder la paciencia, cuesta, cuesta mucho. Pero tenemos que avanzar con el diálogo. Intento abstenerme de calificarla, porque puede ser, pero sigamos", aseveró el Papa.
Preguntado por si ha podido mantener algún tipo de contacto con el presidente chino, Xi Jinping, presente en Kazajistán estos días, el Papa afirmó: "Tuvo una visita de Estado allí, pero yo no lo he visto".
Nacido en 1980, soy un esposo y padre de familia español y periodista con más de 20 años de experiencia en medios impresos y digitales, especializado en información sociopolítica y religiosa. He trabajado más de 10 años en defensa de los derechos humanos y tengo acreditaciones en Periodismo y Comunicación Integral. Desde julio de 2022, soy corresponsal de ACI Prensa y EWTN Noticias en España, cubriendo eventos internacionales de la Iglesia Católica.
