El Papa Francisco aceptó este viernes 20 de julio la renuncia de Mons. Juan José Pineda al cargo de Obispo Auxiliar de Tegucigalpa en Honduras, envuelto en acusaciones de inconductas sexuales y malos manejos financieros.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede informó de la aceptación de la renuncia de Mons. Pineda, pero no dio detalles de la misma.
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En una carta difundida por la prensa local, Mons. Pineda aseguró que "he intentado, con todo mi corazón, servir a esta porción del Pueblo de Dios, a su Arzobispo, clero, seminaristas y pueblo de Dios. Si lo logré, bendito sea Dios. Si les fallé, pido perdón".
Las razones de la renuncia, prosiguió, las conocen "Dios y mis superiores. He actuado en plena conciencia y libertad. Quisiera que todos estemos en paz".
Sobre las acusaciones contra el ahora Obispo Emérito de 57 años de edad, el National Catholic Register publicó en marzo de este año que dos exseminaristas lo acusaron de graves inconductas sexuales y de haber intentado tener relaciones sexuales con ellos.
A pedido del Papa, en mayo de 2017 el Vaticano encargó una visita apostólica (investigación) en la Arquidiócesis de Tegucigalpa, encomendada al Obispo Emérito de San Isidro (Argentina), Mons. Jorge Casaretto.
El Arzobispo de Tegucigalpa y coordinador del llamado C9, el grupo de cardenales que asiste al Papa en la reforma de la Curia Vaticana, Cardenal Oscar Rodríguez Maradiaga, explicó a ACI Prensa en esa ocasión que la visita apostólica fue solicitada por Mons. Pineda "para limpiar su nombre".
En diciembre de 2017 ACI Prensa conversó con una fuente que prefirió no ser identificada, que explicó que en el país es motivo de escándalo "la anómala situación del Obispo Auxiliar de Tegucigalpa, Mons. Juan José Pineda, que vive con un 'asistente', que nadie explica a qué viene".
El diario italiano L'Espresso denunció también que un "misionero", cuya identidad no se reveló, dijo que en Tegucigalpa "hay gastos para amigos íntimos de Pineda, como un mexicano que se hace llamar 'Padre Erick', pero que nunca ha hecho sus votos".
"El personaje se llama Erick Cravioto Fajardo" y "ha vivido con él bajo el mismo techo, le ha comprado un departamento en el centro y un auto. El dinero, me temo, viene de las casas de la universidad o de las de la diócesis. Hemos denunciado esta estrecha e indecorosa relación también al Vaticano. El Papa sabe todo", agregó el misionero.
L'Espresso también acusó a Mons. Pineda de haber sido señalado "recientemente por los diarios locales como el director de operaciones financieras imprudentes y receptor de fondos públicos (alrededor de un millón de euros) para proyectos gaseosos destinados 'a la formación de los valores de los fieles y la comprensión de las leyes y la vida social'. Gastos que, según los acusadores, nunca han sido respaldados por justificaciones válidas".
El diario hondureño ConfidencialHN publicó en diciembre de 2016 una denuncia similar, basada en un informe realizado por un grupo de laicos y clérigos hondureños que denunciaron el manejo de dinero por parte de la Universidad Católica y el papel de Mons. Juan José Pineda.
La publicación del informe le valió un juicio por difamación ante la justicia hondureña, que desestimó el caso.