El Papa Francisco aceptó la renuncia al cargo de Arzobispo de Lyon del Cardenal Philippe Barbarin, que en enero de este año fue absuelto por la justicia de Francia de la acusación de encubrimiento de abusos sexuales cometidos por el sacerdote Bernard Preynat y por la que había sido condenado en marzo de 2019 a seis meses de prisión suspendida.
La noticia de la aceptación de la renuncia del Cardenal la dio este viernes 6 de marzo la Oficina de Prensa del Vaticano sin dar detalles al respecto.
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Poco después de ser condenado en 2019, el Cardenal se reunió con el Papa Francisco para presentar su renuncia, pero el Pontífice se negó a aceptarla mientras su apelación estaba pendiente. Sin embargo, en ese momento el Purpurado decidió retirarse del gobierno cotidiano de la arquidiócesis francesa.
"Creo que es importante que se pase esta página" y que "recemos por quien venga a servir como Arzobispo", dijo el Cardenal Barbarin en un video publicado hoy por la Arquidiócesis de Lyon tras conocer la decisión del Papa de aceptar su renuncia.
El Purpurado también destacó la necesidad de rezar por las víctimas de Bernard Preynat e hizo votos para que con el próximo Arzobispo "se inicie una nueva etapa en Lyon".
En junio de 2019, el Santo Padre nombró Administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Lyon a Mons. Michel Dubost, Obispo Emérito de Évry-Crobeil-Essonnes.
"Para algunos de nosotros (la renuncia) ha sido una sorpresa y sentimos que vivimos un momento importante para la diócesis", afirma Mons. Dubost en un comunicado publicado este viernes en el sitio web de la Arquidiócesis de Lyon.
Según las normas de la Iglesia los obispos deben presentar su renuncia a los 75 años de edad, tras lo cual el Papa decide si aceptarla o no. En algunos casos y por cuestiones de salud u otras que impidan que el Prelado se mantenga en el gobierno, el Santo Padre decide aceptar la renuncia antes de la mencionada edad estipulada en el Código de Derecho Canónico.
"Hemos pasado una página llena de momentos extraordinariamente ricos que nos hacen dar gracias. Lo haremos de manera particular el 15 de mayo a las 19 horas en la Catedral junto al Cardenal. Esto también ha estado marcado por el drama, la prueba", agrega el Prelado.
"En algunas semanas tendremos un nuevo Arzobispo. Su venida debe ser ocasión para renovarnos en la unidad. Mientras lo esperamos, el Santo Padre me ha pedido que siga con ustedes y que continúe en el cargo episcopal de la diócesis como Administrador", explica Mons. Dubost en el comunicado.
"Para nosotros, no hay mejor manera de prepararnos para el mañana que seguir misioneros, viviendo la misión que Cristo nos ha dado y seguir caminando con Él por los caminos de los hombres", destaca el Administrador Apostólico de Lyon.
La acusación contra el Cardenal Barbarin de la que fue absuelto
El 30 de enero de 2020 la Corte de Apelaciones de Lyon absolvió al Cardenal Barbarin luego que los fiscales del caso solicitaran la reivindicación del Purpurado. El abogado del Cardenal francés calificó el resultado de "lógico" y dijo que su defendido fue objeto de "calumnia" durante el juicio.
Cuando fue juzgado en marzo de 2019, otros cinco funcionarios arquidiocesanos fueron absueltos. La absolución del Cardenal Barbarin era ampliamente esperada en la apelación, luego que el fiscal del caso argumentó que no había pruebas de irregularidad legal del Purpurado y, por lo tanto, no había motivos para la condena.
El Cardenal Barbarin fue acusado de no denunciar ante las autoridades judiciales, entre julio de 2014 y junio de 2015, los abusos que el P. Bernard Preynat cometió contra docenas de menores en las décadas de 1980 y 1990.
En 2017, el Cardenal señaló al diario francés Le Monde que no ocultó las acusaciones contra Preynat, pero dijo que su respuesta a las acusaciones había sido "inadecuada". Asimismo señaló que abrió una investigación contra el abusador y dispuso su retiro del ministerio sacerdotal en 2015.
El juicio del Cardenal Barbarin también fue noticia cuando en octubre de 2018 el tribunal a cargo emitió una citación para el Cardenal Luis Francisco Ladaria Ferrer, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF).
El Vaticano invocó la inmunidad diplomática, señalando que al ser ministro del Estado del Vaticano, el Purpurado español está protegido por las normas internacionales.
Para la citación judicial se tomó en cuenta una carta que el Cardenal Ladaria envió al Cardenal Barbarin, aconsejándole que tomara medidas disciplinarias contra Preynat, "para evitar el escándalo público".
Los abogados de los demandantes querían que el Cardenal Ladaria testificara respecto al hecho de que la instrucción de evitar el escándalo era una orden para evitar ir a juicio. De ser el caso, indicaron, el prefecto de la CDF habría sido cómplice al no denunciar al sacerdote abusador ante las autoridades.
Las denuncias contra Preynat se hicieron públicas en 2015. Los fiscales abandonaron el caso al año siguiente después de una investigación inicial, pero un grupo de más de 80 víctimas logró reabrir el caso. Ahora enfrenta un proceso en el que podría ser encarcelado hasta diez años.
En el momento de su condena, el Cardenal Barbarin dijo que "después de la decisión de la corte, independientemente de mi destino personal, quiero reiterar en primer lugar mi compasión por las víctimas y que ellas y sus familias tienen en mis oraciones".