El Cardenal alemán Walter Brandmüller señaló que decir que existe relación entre la homosexualidad y los abusos cometidos por algunos miembros del clero en la Iglesia no es homofobia.
"No sería realista olvidar o no admitir que el 80% de los casos de abusos en la Iglesia fueron perpetrados contra adolescentes hombres, no niños. Esta relación entre abusos y homosexualidad ha sido probada estadísticamente, y no tiene nada que ver con la homofobia, sin importar lo que uno crea que ese término signifique", dijo el Purpurado en entrevista concedida a CNA Deutsch, agencia en alemán del Grupo ACI.
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La entrevista con CNA Deutsch se dio luego que el Cardenal conversó la semana pasada con la agencia DPA sobre los casos de abusos cometidos por miembros de la Iglesia, su relación con la homosexualidad, y cómo lo que ha sucedido en el clero católico "no es sino lo que está sucediendo en toda la sociedad".
El también historiador dijo a CNA Deutsch que "el abuso sexual –en cualquiera de sus formas– no es específicamente un fenómeno católico"; lo que se puede explicar en Alemania, por ejemplo, con la "sexualización de la sociedad durante décadas –piense en Oswalt Kolle y Beate Uhse– que ha dejado huella en los católicos y en quienes trabajan para la Iglesia. Esto permite ayudar a explicar lo terrible de las transgresiones, pero de ninguna manera es una excusa para los abusos".
Oswalt Kolle fue un escritor, productor audiovisual y defensor de la revolución sexual en Alemania durante las décadas de 1960 y 1970, mientras que Beate Uhse AG es una distribuidora alemana de pornografía, juguetes sexuales y lencería.
"Debe enfatizarse enérgicamente que cientos de miles de sacerdotes y religiosos sirven fiel y desinteresadamente a los hombres y a Dios. Ponerlos bajo la sospecha general es ofensivo e injustificado, considerando el pequeño porcentaje de abusadores. Además, también es una perspectiva excesivamente simplista ver en este tema solo a la Iglesia Católica", prosiguió el Purpurado.
Según un reciente estudio realizado en Estados Unidos, en la década de 1950 los sacerdotes homosexuales eran el 4% del clero, mientras que en la década de 1980 el porcentaje subió a 16%.
El Cardenal dijo que para prevenir que ocurran más abusos es importante recordar los principios morales alentados por San Juan Pablo II y su teología del cuerpo.
En cuanto a los candidatos al sacerdocio y la vida consagrada, el Purpurado alemán dijo que "la enseñanza doctrinal de Juan Pablo II también debe ser parte de la selección y formación de los futuros sacerdotes y educadores religiosos. Tenemos que poner atención a su constitución psicofísica. Pero no debemos olvidar que esto no se trata solo de psicología o sociología, sino de reconocer una verdadera vocación que viene de Dios. ¡Especialmente cuando se trata de sacerdotes!".
"Solo cuando estos aspectos con considerados adecuadamente y se toman en cuenta, un candidato puede ser admitido para la ordenación", resaltó el Cardenal. "Esto es algo que el Papa Francisco ha dicho en varias ocasiones", agregó en la entrevista a CNA Deutsch.
En el libro "La fuerza de la vocación", de Publicaciones Claretianas, el Papa Francisco afirmó que un homosexual no puede ser candidato para el sacerdocio o la vida consagrada, y que los formadores deben ser "exigentes" en este punto.
"La cuestión de la homosexualidad es una cuestión muy seria que hay que discernir adecuadamente desde el comienzo con los candidatos, si es el caso. Hemos de ser exigentes. En nuestras sociedades parece incluso que la homosexualidad está de moda y esa mentalidad, de alguna manera, también influye en la vida de la Iglesia", señala en el libro que salió a la venta el pasado 3 de diciembre.
Sobre la crisis actual en la Iglesia, el Cardenal Brandmüller resaltó que solo podrá ser revertida si, "por encima de todo, los obispos la entienden como un llamado y un incentivo para un nuevo despertar espiritual, que llegue hasta las raíces de nuestra fe".
Asimismo, propuso a los seminarios de las "llamadas comunidades tradicionalistas" como un modelo a adoptar para el éxito, ya que no tienen escasez de vocaciones.
El Cardenal lamentó que actualmente en Europa occidental "algunas declaraciones de la Iglesia están más o menos en línea con los temas que promueven los medios" y que "algunos obispos, especialmente en temas morales, han expresado perspectivas que son diametralmente opuestas a las Escrituras, aunque al hacerlo uno se saca a sí mismo de la base de la existencia de la Iglesia".
"Además, da más vergüenza que la Iglesia en Alemania, financieramente poderosa y espiritualmente en hundimiento, asuma que tiene un mandato para guiar a sus 'hermanos y hermanas pobres' en todos los lugares donde la Iglesia está experimentando un periodo de vitalidad espiritual y crecimiento como Europa del Este, el norte de Europa, Asia o África", continuó.
Para concluir, el Cardenal Brandmüller dijo que "a pesar de los vaivenes, no todo está perdido. De hecho Jesucristo está a bordo incluso cuando parece estar dormido. Esta es una imagen de la Iglesia".
Traducido y adaptado por Walter Sánchez Silva. Publicado originalmente en CNA Deutsch