La plataforma ciudadana Unidos por la Vida denunció que la Corte Constitucional de Colombia se ha convertido en "sicarial", tras su polémico fallo que despenaliza el suicidio asistido en el país.
"Lamentamos la reciente sentencia de la Corte Constitucional que despenaliza el suicidio asistido" por ser el fallo "una nueva violación a la Constitución de Colombia que en su artículo 11 dice claramente que la vida humana es inviolable", indicó Unidos por la Vida en un comunicado del 13 de mayo.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
El 12 de mayo, la Corte Constitucional despenalizó el suicidio médicamente asistido (SMA) por seis votos a tres. La diferencia con la eutanasia es que en el SMA es el mismo paciente el que se administra, con la ayuda de un agente sanitario, la sustancia que le causará la muerte.
En la eutanasia es el profesional de la salud el que administra el fármaco al paciente.
Unidos por la Vida recuerda que este fallo se une a otros de la Corte Constitucional, contrarias a la vida humana, como el del 21 de febrero de 2022 que permite el aborto libre hasta los 6 meses de gestación (24 semanas) y hasta los 9 meses bajo las causales que lo despenalizaron en 2006, o el que despenaliza la eutanasia inclusive para personas sin enfermedades terminales y menores de edad de julio de 2021.
El caso más emblemático hasta ahora, de muerte por eutanasia en Colombia, ha sido el de Martha Sepúlveda, mujer de 51 años que sufría de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) y que murió el pasado 8 de enero, convirtiéndose en la segunda persona en morir bajo la sentencia de la Corte Constitucional.
"Lamentamos que varios magistrados de la Corte han caído en una especie de episodio compulsivo que les hace emitir sentencias para ordenar matar a diestra y siniestra con el argumento de garantizar el libre desarrollo la personalidad y la autonomía del individuo", señala Unidos por la Vida.
La plataforma cuestiona luego a los magistrados si pueden explicar "en qué consiste esta autonomía en un cadáver o como se pueda dar el libre desarrollo de la personalidad en un bebé destrozado por el aborto".
"Quizá por eso se escucha cada vez de manera más insistente que la Corte dejo de ser Constitucional y se convirtió en sicarial", subraya.
Los peligros de la sentencia del suicidio asistido y una posible solución
Unidos por la Vida explica que con la nueva sentencia del suicidio asistido se abre "la posibilidad para que se obligue a los profesionales de la salud a suministrar compuestos letales a los suicidas, aun contra de la voluntad del profesional", algo que va contra el "juramento hipocrático que les prohíbe precisamente proporcionar sustancias que causen la muerte así sean solicitadas por el paciente".
"Esto es realmente muy grave pues se obliga a todo el sistema de salud a realizar acciones mortales que están totalmente en contra de su misión, que es aliviar la enfermedad para proporcionar vida", alerta la plataforma ciudadana.
Unidos por la Vida resalta que "la solución lo sabemos bien, no puede ser la muerte para las personas que piensan en el suicidio, sino prestarles los cuidados paliativos ante enfermedades crónicas o terminales".
También se les debe dar "ayuda psicológica y de apoyo social e inclusión a los que pasan por problemas y depresiones, de tal forma que les permita salir de su estado actual abriendo sus horizontes para comprender la dignidad y belleza de la vida".
"Lo contrario es condenarnos a desaparecer como sociedad, como país y como humanidad", advierte.
Soy esposo desde 2008. Con mi esposa tenemos tres hijos aquí y uno que se fue al cielo en 2023, antes de nacer. Desde que me incorporé a ACI Prensa en 2005, he tenido la oportunidad de cubrir diversos eventos de la Iglesia Católica. Entre ellos, las Jornadas Mundiales de la Juventud en Colonia, Madrid y Río de Janeiro y los viajes apostólicos del Papa Benedicto XVI a México y del Papa Francisco a Corea del Sur. He sido enviado al Vaticano para cubrir los sínodos de la Familia, en 2015; de la Amazonía, en 2019 y el de la Sinodalidad, en 2023. Sigo de cerca la situación de la Iglesia Católica en Nicaragua, que sufre la persecución de la dictadura de Daniel Ortega, así como la actualidad eclesial en la región.
