Miles de personas, incluyendo un gran grupo de fieles católicos, participaron de una caminata pacífica organizada por líderes cristianos en Florida (Estados Unidos), para honrar la vida de George Floyd y otros afroamericanos víctimas de racismo y abuso policial.

 

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Los asistentes de "A Walk Of Mourning And Restoration", caminaron el viernes 5 de junio vestidos de negro, en señal de luto, a través de Church Street en la ciudad de Orlando. Los líderes cristianos promovieron el evento para promover la "sanación a través de la oración".

"Mientras la gran multitud caminaba bajo cielos grises, los versos de las Escrituras se intercalaban con los nombres de 100 de las 400 vidas perdidas debido al racismo desde 2014. La caminata comenzó en el Camping World Stadium y continuó durante una milla hasta Division Avenue, en el límite del distrito de Parramore", señala un artículo de Florida Catholic, el diario oficial de la Arquidiócesis de Miami.

El Obispo de Orlando, Mons. John Noonan, dijo que, como líder religioso, era su deber ofrecer apoyo al pastor Tim Johnson "mientras reunía a todos los líderes religiosos de Orlando para rezar". 

"Como él indica: Hay un tiempo para llorar y un tiempo para sanar", acotó. 

 

 

"San Pablo nos recuerda que, cuando un miembro del cuerpo de Cristo sufre, todos sufrimos porque somos un solo cuerpo. Los hombres y mujeres negros están sufriendo en este momento en nuestras comunidades debido a la pérdida de respeto por toda la vida humana", agregó el prelado.

Recordando las palabras del Papa Francisco en una audiencia general unos días antes, el obispo dijo que "no podemos tolerar ni hacer la vista gorda ante el racismo y la exclusión de ninguna forma".

"Hoy, me uno a la Iglesia en Saint Paul y Minneapolis, y en todo Estados Unidos, rezando por el descanso del alma de George Floyd y de todos aquellos que han perdido la vida como resultado de la pecado de racismo. Hoy, les pido a todos los católicos que se unan a mí con nuestros hermanos y hermanas negros en la oración", agregó.

El término de la caminata fue en un escenario junto a Division Avenue, una demarcación de larga data para la separación de barrios étnicos. El pastor Johnson dijo que escogieron ese lugar "para decir que las barreras deben romperse".