Tras conocer la decisión de la Corte Suprema de Australia que lo absolvió de los cinco cargos de abuso sexual que pesaban sobre él, el Cardenal George Pell publicó una declaración en la que agradeció el apoyo y las oraciones de sus amigos y familiares; y en la que precisó que no le guarda rencor a su acusador.
"Consistentemente he mantenido mi inocencia mientras he sufrido una seria injusticia", afirmó el Cardenal australiano en el texto publicado este 7 de abril por la Arquidiócesis de Sidney.
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"Esto ha sido remediado hoy con la decisión unánime de la Corte Suprema", agregó el Purpurado, quien dijo además que espera "poder leer luego detalladamente las razones del fallo".
"No le tengo rencor a mi acusador. No quiero que mi absolución haga más intensos el dolor o la amargura que muchos sienten. Ciertamente ya hay suficiente de eso".
"El único cimiento para una sanación a largo plazo es la verdad y el único cimiento para la justicia también es la verdad, porque la justicia significa verdad para todos", subrayó el Cardenal.
El Cardenal Pell fue acusado de haber abusado sexualmente de dos niños coristas cuando era Arzobispo de Melbourne (Australia) en 1996. Sus abogados señalaron entonces que la acusación era "simplemente imposible", pero luego de un juicio nulo, fue sentenciado en el segundo.
En su declaración, el Cardenal aseguró que "mi juicio no fue un referéndum sobre la Iglesia Católica, tampoco un referéndum sobre cómo las autoridades eclesiales han lidiado con el delito de la pedofilia en la Iglesia". "El punto fue si yo había cometido esos delitos horribles. No lo hice".
"Quiero agradecer a mi familia por su amor y apoyo y todo lo que han hecho en este tiempo, a mi pequeño grupo de consejeros, a los que hablaron por mí y sufrieron como resultado de eso, y a todos mis amigos y a quienes me apoyaron dentro y fuera del país", continuó el Cardenal Pell.
"También quiero expresar mi más profundo agradecimiento a mi equipo legal por su decisión firme de hacer prevalecer la justicia, de dar luces ante la oscuridad manufacturada y revelar finalmente la verdad", subrayó.
La Corte Suprema de Australia absolvió de forma unánime al Cardenal Pell, señalando en su fallo que "no había evidencia" que sostuviera la narrativa del acusador, y precisaron que "teniendo en cuenta todas las ventajas que tuvo el jurado" existe "una posibilidad significativa de que, en relación a los cargos, una persona inocente haya sido condenada".
Con este fallo concluye un proceso que comenzó en 2013, cuando la policía del estado de Victoria abrió una investigación contra el Cardenal pese a que no había acusaciones en su contra en ese momento.
En muchas ocasiones el Cardenal aseguró ser inocente y en 2017 dejó su puesto al mando de la Prefectura de Economía en el Vaticano para volver a Melbourne y defenderse personalmente.
En marzo de 2019 fue sentenciado a seis años de prisión y el Cardenal con sus abogados apelaron la sentencia, reiterando nuevamente que era inocente de todos los cargos. Hablando con algunos amigos comentaba que el tiempo en la cárcel lo tomaba como una especie de retiro monástico.
"Se ve él mismo como si viviera un tiempo de purgatorio por los pecados de la Iglesia y lo abraza de esa forma", comentó en 2019 a CNA, agencia en inglés del Grupo ACI, un amigo del Cardenal.
Traducido y adaptado por Walter Sánchez Silva. Publicado originalmente en CNA