La escasez en Irak es fuerte, sin embargo gracias a Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), se ha podido conseguir alojamiento para los más de 120.000 desplazados que huyeron del Estado Islámico (ISIS), que sin embargo no culpan a Dios por la tragedia, porque saben que esta viene del hombre y porque la fe cristiana es parte de su identidad, afirmó Mons. Amel Nona, Arzobispo católico-caldeo de Mosul.
La pregunta de dónde está Dios en esta persecución por la fe "tan sólo os la hacéis en Occidente, en Oriente no nos la hacemos jamás. Para nosotros la fe está mezclada con nuestra identidad y no se puede separar la fe de la identidad", afirmó reciente el Prelado.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Mons. Nona dijo que aunque los refugiados "han perdido la fe en su tierra" y en la sociedad musulmana, "lo único que no han perdido ha sido la fe cristiana. Estamos orgullosos, porque de las 120.000 personas que había en esa zona ninguno se ha convertido al Islam".
En esta situación desoladora los cristianos no se quejan, no se lamentan ni gritan a Dios pidiendo justicia. "Cuando sucede algo así, nosotros en Oriente agradecemos a Dios todo. Porque sabemos bien que Dios no ha sido el causante de este problema sino el hombre. En esta situación la existencia de Dios es más necesaria que nunca, la presencia de Dios es más fuerte", precisa el Arzobispo de Mosul.
"Cuando hay una violencia tan brutal por parte del hombre nosotros tenemos aún más fuerte la presencia de Dios porque Él es el bien. Creemos más aún, porque es más necesario que nunca creer en una situación tan extrema como esta", asegura el Prelado.
La pregunta de dónde está Dios en esta persecución por la fe "tan sólo os la hacéis en Occidente, en Oriente no nos la hacemos jamás. Para nosotros la fe está mezclada con nuestra identidad y no se puede separar la fe de la identidad".
Estos mártires de la fe tan solo piden que el resto del mundo no se olvide de ellos, de su sufrimiento, de la injusticia que sufren cada día desde hace más de seis meses. Por eso cada vez que reciben ayuda para ellos significa mucho más que la solución a un problema de alojamiento o comida.
"Esta ayuda no es sólo material sino que muestra que los demás cristianos no nos olvidan y sienten como suyas las necesidades de los cristianos de Irak. No podemos pedirles que se queden en su tierra sufriendo si no les ayudamos", explica el Arzobispo de Mosul.
"No podemos saber qué ocurrirá pero hasta ahora no hemos visto señales positivas para liberar nuestra tierra y nuestros pueblos. Los militantes islámicos están en la ciudad de Mosul, en la planicie de Nínive, en buena parte de Irak, pero el ejército iraquí no hace nada por liberar estas tierras, no sabemos el motivo exacto por el que no se liberan pero tan sólo hay bombardeos aéreos. Hasta ahora no hemos visto la liberación de alguna zona o al menos un proyecto de liberación", afirma en declaraciones a ACI Prensa.