El Arzobispado de Santiago de Chile envió al Vaticano la solicitud de dimisión del estado clerical del presbítero Tito Rivera, declarado en agosto de 2018 culpable por abuso sexual contra mayores de edad y que se encuentra suspendido del ministerio sacerdotal público.
Mediante un comunicado, la entidad informó que la solicitud fue enviada este 14 de marzo a la Santa Sede, "sugiriendo al Santo Padre que se tramite con celeridad".
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Los escándalos de abusos de Tito Rivera salieron a la luz pública este mes de marzo, tras conocerse la investigación que lleva la Fiscalía Regional de O'Higgins sobre una presunta violación perpetrada por el sacerdote en contra de un adulto al interior de la Catedral Metropolitana de Santiago el año 2015.
El denunciante, Daniel Rojas Álvarez, que exige una indemnización de 350 millones de pesos (alrededor de medio millón de dólares), acusó de encubrimiento al Cardenal Ricardo Ezzati, algo que el Arzobispo de Santiago desmintió en una entrevista televisiva días después de que el caso saliera a la luz pública
En medio de la polémica, el miércoles 13 de marzo Tito Rivera concedió una entrevista exclusiva a un programa de televisión chileno donde negó la denuncia por violación, pero admitió haber tenido actos sexuales con varios hombres y con una mujer, todos mayores de edad y de forma consentida.
Además de calificar la denuncia como un "montaje" en su contra, el acusado señaló que en la Iglesia Católica hay un "ambiente favorable" para prácticas homosexuales y que conoce a muchos sacerdotes homosexuales, "un 50 por ciento, quizá más o quizás menos".
Fue en esta entrevista que Rivera, también involucrado en una investigación por robo de objetos sagrados, hizo pública su solicitud de dimisión del estado clerical.
En su comunicado, el Arzobispado de Santiago ratificó la solicitud y agregó que "rechazamos tajantemente" los dichos de Rivera, que van "en contra de víctimas de abusos, del ministerio sacerdotal y de los sacramentos del matrimonio y de la confesión, entre otras expresiones".
Este 14 de marzo, durante la Eucaristía por los 201 años del Voto de O'Higgins en la Catedral de Santiago, el Cardenal Ezzati se refirió a la entrevista de Tito Rivera y su solicitud de dimisión del estado clerical.
"Hoy día quiero reafirmar la santidad de la vocación sacerdotal. Quiero reafirmar junto con ustedes y proclamar en voz alta, la santidad de la vida matrimonial, la santidad del ministerio presbiteral, reconociendo y agradeciendo el servicio de tantísimos hermanos sacerdotes, que en el día a día de su vida, de sus comunidades, están ofreciendo un precioso servicio que todos juntos estamos llamados a hacer presente, en la vida de la comunidad humana y cristiana", dijo el Arzobispo de Santiago.
