El Papa Francisco se abstuvo de leer un discurso planeado en una audiencia en el Vaticano este jueves a causa de problemas respiratorios y por seguir bajo los efectos de la anestesia que se le administró durante su última operación.
Al recibir en audiencia a representantes el la Reunión de las Obras de Ayuda a las Iglesias Orientales (Roaco) y la Youth Conference, que participan del 19 al 22 de junio en Roma en un encuentro para analizar la situación de diversos países, entre ellos Turquía, Irán, Eritrea y la región de Tierra Santa, el Papa se excusó de leer el discurso que tenía preparado, debido a "una respiración no buena" pues continúa "bajo los efectos de la anestesia", de acuerdo a Vatican News.
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A pesar de su dificultad respiratoria, el Santo Padre se manifestó "contento por esta visita". En el discurso que tenía preparado, y que entregó a los asistentes, les agradeció su "solidaridad activa" que "ayuda a curar las heridas y es como una caricia en el rostro de los que sufren".
Además, animó a mantener su labor de asistencia en todo el mundo, pidiendo especialmente una "concreta cercanía, cercanía de oración y de caridad, al martirizado pueblo ucraniano".
El Papa Francisco, de 86 años, fue sometido a una exitosa cirugía abdominal el 7 de junio. El 16, en el día del Sagrado Corazón, fue dado de alta. Al salir del hospital Gemelli de Roma, dijo a los periodistas con buen humor: "Estoy vivo"
En un video mensaje difundido este 22 de junio, el Santo Padre reiteró su deseo de participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Lisboa 2023, que comenzará a inicios de agosto de este año.
"Yo ya tengo todo en la mano, porque tengo ganas de ir", señaló el Papa. "Algunos piensan que por la enfermedad no puedo ir, pero el médico me dijo que puedo ir. Así que voy a estar con ustedes. Adelante a los jóvenes", expresó.