Una taquería en Sacramento, California (Estados Unidos), hizo que sus empleados "se confiesen" con un falso sacerdote para intentar silenciar a sus trabajadores ante diversas violaciones a sus derechos laborales, algo que finalmente quedó al descubierto tras una investigación de las autoridades.
"El equipo de investigación federal de horas y salarios ha visto empresas corruptas intentar todo tipo de estafas para pagar menos salarios al personal y para intimidar o tomar represalias contra el personal, pero el intento de un restaurante del norte de California de usar un supuesto sacerdote para hacer que el personal admita 'pecados' en el lugar de trabajo puede estar entre las más desvergonzadas", señala una nota del Departamento de Trabajo de Estados Unidos, publicada en su sitio web el 12 de junio.
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Durante la investigación, un trabajador de la Taquería Garibaldi en la ciudad de Sacramento, cuya dueña es la empresa Che Garibaldi Inc., denunció que el restaurante ofrecía a los empleados la posibilidad de "confesarse" con una persona a la que presentaban como sacerdote, para escuchar sus confesiones durante el horario de trabajo.
El empleado denunció que esta persona instaba a los empleados a "sacar los pecados" cometidos contra su empleador: les preguntaba si llegaban tarde, si habían hecho algo malo contra el empleador o si tenía alguna mala intención en su contra.
La investigación reveló que la taquería no pagaba horas extras, utilizaba de manera ilegal las propinas para solventar el suelo de los administradores y amenazaba al personal con consecuencias de inmigración adversas si denunciaban a la Taquería Garibaldi por sus malas prácticas.
Según recoge la publicación del Departamento de Trabajo de Estados Unidos, el Procurador Regional de Trabajo, Marc Pilotin, indicó que "los intentos despreciables de esta empresa para tomar represalias contra el personal tenían por objetivo silenciar a los trabajadores, obstruir una investigación y prevenir la recuperación de salarios no pagados".
En ese sentido, agregó, "el Departamento de Trabajo de EE.UU. y su Oficina del Procurador no tolerarán las represalias en el lugar de trabajo y tomarán medidas rápidas para dejar claro que el estado inmigratorio no tiene conexión con los derechos laborales según la Ley de Normas Justas de Trabajo".
Al concluir la investigación y el juicio contra la empresa dueña de la taquería, el juez William B. Shubb del Tribunal Distrital de Estados Unidos por el Distrito Este de California ordenó el 8 de mayo que Che Garibaldi Inc. y sus propietarios, Eduardo Hernández, Hector Manuel Martínez Galindo y Alejandro Rodríguez, paguen 145.000 dólares: 70.000 por salarios atrasados, 70.000 por daños y perjuicios para 35 trabajadores, y una multa civil de 5 mil dólares.
El juez ordenó también el pago de otros 50.000 dólares por una compensación adicional por daños y perjuicios.
Bryan J. Visitacion, director de medios y comunicaciones de la diócesis de Sacramento, explicó a CNA -agencia en inglés de EWTN News-: "Nuestra propia investigación no encontró evidencia ni conexión alguna entre la diócesis de Sacramento y el supuesto sacerdote en este asunto".
"Si bien no sabemos quién era la persona en cuestión, confiamos plenamente en que no era un sacerdote de la diócesis de Sacramento", precisó.