Hombres armados irrumpieron en la noche del sábado una casa parroquial en la ciudad de Jos, en la zona central de Nigeria, y secuestraron al sacerdote Marcellus Nwaohuocha.
La Congregación de los Oblatos de la Inmaculada Virgen María (OMI) en Nigeria informó del secuestro este domingo 18 de junio, a través de un comunicado compartido con CNA Deustch, agencia en alemán del Grupo ACI.
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"Los hombres armados desconocidos dispararon a su seguridad antes de llevar a nuestro hermano a un lugar todavía desconocido", indica el mensaje.
La Congregación hizo, además, un llamado a "orar por la seguridad y liberación del Padre Marcelo durante el ofrecimiento de la Santa Misa y en las oraciones privadas".
El secuestro del P. Nwaohuocha es el último caso de violencia contra los sacerdotes católicos en Nigeria, y decenas de cristianos.
La Arquidiócesis de Kaduna en Nigeria anunció "con gran tristeza" en mayo que el P.Joseph Aketeh Bako, secuestrado el 8 de marzo, había sido asesinado por sus secuestradores.
Además de los contrastantes secuestros contra miembros del clero, Nigeria ha experimentado un marcado incremento de la violencia por parte de pandillas y diferentes grupos terroristas.
Según el informe "¿Perseguidos y olvidados?" de la fundación internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), se calcula que en Nigeria hasta 7.600 cristianos fueron asesinados entre enero de 2021 y junio de 2022, siendo el yijadismo un factor clave en muchas de las muertes.