En un telegrama de pésame enviado este jueves 15 de junio, el Papa Francisco lamentó los fallecidos en el naufragio frente a las costas de Grecia de un barco en el que viajaban numerosos migrantes, entre ellos unos 100 niños.
El mensaje, firmado por el Secretario de Estado, el Cardenal Pietro Parolin, y dirigido al Nuncio Apostólico en Grecia, Mons. Jan Romeo Pawłowski, precisa que el Santo Padre está "profundamente consternado" por lo ocurrido.
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El Pontífice lamenta la "devastadora pérdida de vidas humanas" y ofrece sus sentidas oraciones por las familias de los migrantes, por sus seres queridos "y por todos los traumatizados por esta tragedia".
Asimismo, expresa su cercanía y asegura sus oraciones por los supervivientes, a "quienes les prestan cuidados y cobijo" y al personal de emergencia.
Por todos ellos, el Papa Francisco "invoca los dones de fortaleza, perseverancia y esperanza de Dios Todopoderoso".
Al menos 79 personas han fallecido después de que un barco en el que viajaba un gran número de migrantes, entre ellos unos 100 niños, naufragara el miércoles 14 de junio en el mar Jónico, a 87 kilómetros de la ciudad de Pylos, en la región de Peloponeso.
Los equipos de rescate han podido salvar a 104 hombres mayores de edad con vida, y todavía continúan los trabajos de búsqueda de mujeres y niños, que no han cesado en toda la noche.
Los supervivientes proceden de lugares como Pakistán, Egipto, Siria y Palestina. Según algunos medios locales, entre 500 y 700 inmigrantes viajaban a bordo de la embarcación.