Durante la madrugada del 24 de mayo desconocidos profanaron la capilla de Nuestra Señora de Fátima en la localidad de Campuzano, en Masaya (Nicaragua).
En un comunicado, la parroquia Santa Ana de Nindirí, a la que pertenece la capilla profanada, denunció que la "acción sacrílega consistió en forzar la seguridad de la puerta y sustraer de la capilla el Sagrario, el cual fue forzado para robar el copón, ultrajando las especies consagradas".
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Las hostias, según señaló la parroquia, "quedaron abandonadas en un predio cercano a la capilla".
La parroquia anunció que la tarde de este 25 de mayo se realizará un acto de desagravio, seguido de la celebración de la Santa Misa.
En la página de Facebook de la capilla, junto a las fotos de la destrucción causada por los delincuentes, se lee: "Pueden profanar nuestros templos, quebrar nuestras imágenes, pero nuestra fe sigue siempre en Jesucristo que hizo el cielo y la tierra. Viva Jesús sacramentado".
Esta profanación se suma a los más de 500 ataques que ha sufrido la Iglesia Católica en los últimos cinco años bajo la sombra de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, que han sido recopilados por la abogada e investigadora Martha Patricia Molina.