La Santa Sede confirmó que el Papa Juan Pablo II beatificará a 13 mártires de la Guerra Cristera asesinados “por odio a la fe” durante los años de la persecución religiosa en México. La lista incluye a sacerdotes, laicos, misioneros, un abogado y un joven de 15 años.
Entre los futuros beatos están el sacerdote mexicano José Trinidad Rangel Montaño, nacido en Dolores Hidalgo en 1887; el misionero claretiano español Andrés Sola Molist, nacido en Taradell en 1895; y el laico Leonardo Pérez Larios, nacido en Lagos Moreno en 1883 y asesinado el 25 de abril de 1927 en Rancho de San Joaquín.
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Sobre los llamados “mártires de San Joaquín”, el Presidente de la Conferencia Episcopal Mexicana (CEM), Mons. José Guadalupe Martín Rábago, recordó que los tres fueron personas muy distintas.
“Tenemos un ejemplo de diferentes sectores del pueblo de Dios que serán beatificados y que era un anhelo largo y esperado en el ambiente de nuestras diócesis. Finalmente vamos a ver la culminación y Dios quiera que en un tiempo no lejano los veamos canonizados”, agregó el Prelado.
Otro grupo
También serán beatificados el sacerdote Dario Acosta Zurita, nacido en Naolinco en 1908 y asesinado en Veracruz en 1931, tres meses después de su ordenación sacerdotal; el laico Anacleto González Flores –abogado– nacido en 1888 en Tepatitlán (Jalisco) y asesinado en 1927 en Guadalajara junto a otros siete laicos; y el laico José Sánchez del Río, nacido en 1913 en Sahuayo y asesinado en 1928 con sólo 15 años de edad.
Sacerdotes y laicos perecieron por defender la fe católica en medio de la persecución emprendida por el gobierno de Plutarco Elías Calles. Numerosos católicos fueron asesinados entre los años 1915 a 1937.
Los mártires fueron asesinados durante la denominada Guerra Cristera que tuvo lugar durante el gobierno del antieclesial presidente Calles, que decidió aplicar con ferocidad las llamadas “leyes de reforma”. Estas leyes fueron diseñadas en el año 1857 por el entonces presidente mexicano Benito Juárez quien dispuso la separación de la Iglesia y el Estado, la abolición de las órdenes religiosas, la expropiación de los bienes del clero y la ruptura de los vínculos diplomáticos con el Vaticano.
Una fundadora en camino
El Vaticano también reconoció hoy las virtudes heroicas de la religiosa mexicana Julia de las Espinas del Sagrado Corazón, fundadora de las Religiosas Misioneras Hijas de la Purísima Virgen María. La religiosa nació en 1881 en Oaxaca y murió en 1974 en Toluca.