El 10 de mayo se celebra la fiesta de San Juan de Ávila, Doctor de la Iglesia y referente de importantes santos fundadores que lo conocieron. En una de sus homilías sobre la Virgen, el sacerdote brinda 5 consejos para que la Madre de Dios visite tu casa y tu corazón.
En la web sobre San Juan de Ávila de la Oficina para las Causas de los Santos de la Conferencia Episcopal Española se encuentra un extracto del llamado Sermón 66 del santo, en el que reflexiona sobre la visitación de la Virgen a su prima Isabel.
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1. Imitar su humildad
San Juan describe cómo María, habiendo concebido al Hijo de Dios, no tuvo reparo en ir a servir. Por ello anima a todos a imitar su humildad. En este sentido, resalta que "quien a Dios tiene, en la humildad se conoce", y advierte en no creer que hay signos de santidad cuando falta esta virtud.
2. Nunca andar solo
Más adelante, el Doctor de la Iglesia indica que "nunca la Virgen andaba sola", porque la acompañaban sus virtudes que la volvían más hermosa que todo el oro. Asimismo, destaca que Ella lleva en su vientre a Cristo "para darlo a la casa donde entra". Por consiguiente, motiva a tenerla como compañera diciendo: "¿Qué bien no dará la que lleva a Dios en sí?".
3. Acordarse de Dios
San Juan luego le pregunta a la Virgen: "¿Qué haremos para traerte a nuestra casa, para que nos consueles, y se alegre nuestro niño, y se alumbre nuestro corazón?". Y se responde recordando que nuestra Señora fue a la casa de Zacarías, que significa "el que se acuerda de Dios". "Acordarse de Dios es acordarse de sus mandamientos", enfatiza.
4. Servir a los demás
Luego el santo sacerdote hace notar que María "no va a parlar, no por callejear, no va por enseñar sus vestidos y hermosura, sino por servir" a su anciana y necesitada prima. Por ello nos pide imitar a la Virgen y ayudarla con la oración y "nuestra penitencia" para sentir "el provecho de su visitación".
5. Ser siempre agradecidos
Finalmente, concluye con la siguiente exhortación: "Seámosle agradecidos, y Ella dará gracias a Dios por los bienes que nos hace, estará con nosotros hasta que nuestro Niño nazca, ayudando a los buenos propósitos para que vengan en obra, aquí por gracia y después en la gloria, ad quam nos perducat (a la que nos conducirá). Amén".
Cercano a importantes santos
El 7 de octubre de 2012, el Papa Benedicto XVI firmó una carta apostólica sobre San Juan de Ávila (1499-1569) declarándolo Doctor de la Iglesia. En ella recuerda que San Pablo VI propuso al sacerdote español como "modelo de predicación y de dirección de almas".
Asimismo, destacó que San Ignacio de Loyola lo quería como integrante de los jesuitas, fue guía espiritual de San Juan de Dios -quien fundó la Orden Hospitalaria-, e influyente amigo del reformador franciscano San Pedro Alcántara.
Además, la carmelita Santa Teresa de Jesús luchó para hacerle llegar el manuscrito de su vida al también llamado "Padre Maestro Ávila". La enseñanza de San Juan de Ávila ayudó igualmente a San Juan de la Cruz, San Francisco de Borja, San Juan de Ribera y Santo Tomás de Villanueva.
Para Benedicto XVI, "la doctrina del Maestro Juan de Ávila posee, sin duda, un mensaje seguro y duradero, y es capaz de contribuir a confirmar y profundizar el depósito de la fe, iluminando incluso nuevas prospectivas doctrinales y de vida".