El portavoz de la Conferencia de Obispos Católicos de Rusia, P. Kirill Gorbunov, aseguró que, a un año del inicio de la guerra contra Ucrania, no parece que haya una "salida previsible".
En diálogo con ACI Prensa, el P. Gorbunov, quien también es vicario general de la Arquidiócesis Católica Romana de la Madre de Dios en Moscú, señaló que "la mayoría de la gente sufre", y que "después de un año de conflicto bélico, no hay salida previsible".
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"Parece que la única solución propuesta es empeorar aún más el conflicto", lamentó.
Según el presbítero, quienes acuden a él "en busca de orientación espiritual, hablan del miedo ante un futuro incierto, la desilusión y la ira hacia los que creen responsables de la situación actual; también a veces hacia Dios y la Iglesia".
Además, apuntó que existe "sufrimiento a causa de los conflictos entre compañeros, amigos y parientes, por los diferentes puntos de vista políticos".
El P. Gorbunov indicó que "hay muchísimas familias mixtas ruso-ucranianas, más aún en la Iglesia Católica, y en muchas de ellas la gente se ha encontrado en los lados opuestos del frente".
"Esto causa mucho sufrimiento", subrayó.
Además, indicó que la generación de rusos que crecieron cuando aún existía la Unión Soviética, desaparecida en la década de los 90, "en general tiende a sentirse absolutamente impotente frente al Estado, y no cree que ningún tipo de acción social pueda contribuir a una solución pacífica".
Ayuno y oración por la paz
El vocero del Episcopado ruso resaltó que los obispos "han invitado a nuestros fieles a la oración y al ayuno por la paz".
"Seguimos incluyendo peticiones para el cese de la violencia y la restauración de la paz en las oraciones de los fieles. Algunos grupos de oración también están haciendo oraciones especiales por esta intención", sostuvo.
En otro momento, el P. Gorbunov reconoció la importancia de la Consagración de Rusia y Ucrania al Inmaculado Corazón de María, que el Papa Francisco realizó el 25 de marzo de 2022.
"Estamos muy agradecidos al Santo Padre por la consagración. Este acto ha enviado un mensaje muy poderoso de que a los ojos de Dios y María somos igualmente sus hijos".
"La insistencia del Papa Francisco en que el conflicto solo puede resolverse a través del diálogo y no del poder militar nos da una gran esperanza", añadió.
El P. Gorbunov explicó que "los católicos son una pequeña minoría en Rusia, menos del 1%", y señaló que eso limita la capacidad de la Iglesia para responder al drama de la guerra.
Sin embargo, "nuestras parroquias, especialmente en el sur de Rusia, están tratando de encontrar una manera de ayudar a todos los que se nos acercan y nos piden ayuda".
El vocero del Episcopado católico ruso expresó también su "profunda gratitud a las personas de todo el mundo, especialmente a los católicos, por supuesto, que sienten la necesidad de orar por el pueblo de Rusia, entendiendo que la paz duradera solo se puede lograr a través de la conversión de los corazones y no por la fuerza".
"Parece muy desalentador que 2000 años después del nacimiento y resurrección de Cristo, las personas que profesan ser cristianas no puedan encontrar otra forma de resolver las tensiones políticas que matándose unos a otros", manifestó.
"El Papa Francisco nos recuerda que, como católicos, estamos llamados a ser 'artesanos de la paz', personas que se esfuerzan por dominar la habilidad de unir a las personas y ayudarlas a resolver los conflictos a través de la conversión de los corazones", señaló.