Los obispos de Cuba han llamado a los fieles a elevar oraciones el Miércoles de Ceniza por la Iglesia perseguida en Nicaragua, donde la dictadura de Daniel Ortega ha expulsado a varios sacerdotes y condenado a 26 años de cárcel al Obispo de Matagalpa, Mons. Rolando Álvarez.
En un mensaje publicado el 18 de febrero, los prelados cubanos recordaron la solicitud del Papa Francisco de rezar por Nicaragua.
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El domingo 12, al término del rezo del Ángelus, el Santo Padre expresó su preocupación y tristeza por la expulsión el 9 de febrero de 222 presos políticos –entre ellos algunos sacerdotes–, y la condena contra Mons. Álvarez anunciada al día siguiente. "Rezo por ellos y esa querida nación, y pido sus oraciones", afirmó Francisco.
En su texto, los obispos cubanos anunciaron que acogen la "invitación del Papa a la oración" y hacen suyo el llamado del Pontífice para que el Señor "abra el corazón de los líderes políticos y de todos los ciudadanos a la búsqueda sincera de la paz, que nace de la verdad, la justicia, la libertad y el amor, y se logra mediante el ejercicio paciente del diálogo".
En ese sentido, "en fraterna comunión con nuestros hermanos y hermanas nicaragüenses, invitamos a los fieles católicos cubanos a orar por esa Iglesia y pueblo que sufren".
Para ello, alentaron a ofrecer "una intención especial" por la Iglesia en Nicaragua durante las Misas del Miércoles de Ceniza, "y también durante el ejercicio del Vía Crucis que habitualmente hacemos los viernes del tiempo santo de la Cuaresma".
"El Señor camina junto a nosotros por las sendas del dolor y de la cruz. Y nos asegura con su Resurrección que el amor es más fuerte que el odio. Y la vida triunfa siempre sobre la muerte", recordaron los prelados.
En ese sentido, alentaron a que "esa certeza nos fortalezca en la Esperanza y nos ayude a vivir el tiempo cuaresmal con un renovado compromiso de amor a Dios y a los hermanos".
"A la Virgen Santísima, tan amada por nicaragüenses y cubanos, suplicamos su intercesión para que nuestros pueblos puedan transitar por sendas de paz y de acogida respetuosa de todos", culmina el mensaje de los obispos cubanos.