El Patriarca de la Iglesia greco-católica melquita, Mons. José I Absi, y los líderes de las iglesias ortodoxas en Siria, exigieron a la ONU y a la comunidad internacional levantar las sanciones al país para facilitar la ayuda humanitaria.
El pedido del líder católico y los Patriarcas de las iglesias ortodoxas siríaca y de Antioquía se difundió este 8 de febrero, a dos días del devastador terremoto de 7,8 grados en la región fronteriza entre Turquía y Siria, que ha dejado más de 12.000 fallecidos y 56.0000 heridos.
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Además de las pérdidas humanas, muchas iglesias, instituciones y hogares se destruyeron, y un gran número de familias quedaron desplazadas.
"Nosotros, los tres patriarcas de las iglesias en Siria, exigimos a la ONU y a los países que imponen sanciones a Siria que levanten el bloqueo y los injustos embargos impuestos al pueblo sirio", indicaron en el comunicado.
Además, exigieron a países como Estados Unidos y la Unión Europea, que tomen "medidas excepcionales e inmediatas para asegurar la ayuda".
También se unió a este llamado la Comunidad de San Egidio, que recordó en un pronunciamiento que la región afectada "es escenario de una sangrienta guerra desde hace más de 11 años".
"Estamos preocupados por las provincias sirias de Alepo e Idlib, devastadas por el conflicto y a las que raramente llega ayuda humanitaria", indicó el 7 de febrero.
Según los Patriarcas, el terremoto se suma "a las tragedias de la guerra, crisis, desastres, epidemias y duras penurias económicas" en Siria.
Por ello, llamaron a gobiernos, organismos internacionales y caridades "a acelerar el apoyo a los esfuerzos de ayuda y rescate, independientemente de posturas políticas".
"Oramos por las víctimas y sus familias, pidiendo al Señor el descanso de las almas de los difuntos y la recuperación de los heridos. Rezamos por todos aquellos que trabajan en los campos de socorro, rescate y hospitalización", añadieron.
Solidaridad desde América Latina
Desde América Latina, también se pronunció el Metropolita Ignacio, Arzobispo de México, Venezuela, Centroamérica y el Caribe de la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa Antioquena.
En un comunicado publicado el 6 de febrero, aseguró que su comunidad de fieles se unió también en oración por los heridos y damnificados en Turquía, Siria y Líbano.
"Pedimos a nuestros consejos parroquiales que las ofrendas del siguiente domingo, 12 de febrero, sean separadas para este fin, como expresión de hermandad y solidaridad con nuestros hermanos en las parroquias afectadas", señaló.
"Que Dios bendiga todas las manos extendidas hacia el hermano, con generosidad, y elevadas hacia Dios misericordioso para que se apiade de su pueblo", concluyó.