El Papa Francisco llamó este sábado a los sacerdotes a rechazar "la búsqueda de las satisfacciones mundanas" y más bien abrazar la cruz con una vida de oración y con los sacramentos.
El Santo Padre hizo este llamado durante la audiencia con un grupo de sacerdotes de la Arquidiócesis de Barcelona (España) que se dedican a la pastoral juvenil.
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"Jesús nos llama desde nuestra pobreza, desde nuestra fragilidad, debemos responder a esa llamada con un propósito perenne de conversión. Rechazar el carrerismo, la doble vida, la búsqueda de satisfacciones mundanas, abrazando la cruz, las mediaciones de la Iglesia: sacramentos, vida de oración, ascesis, etc.", señaló el Pontífice.
El Papa Francisco también pidió a los sacerdotes "ser capaces de misericordia (…), no dando lecciones sino testimoniando una experiencia de intimidad con Dios".
Durante la audiencia, el Pontífice comentó que "la experiencia de los apóstoles siempre tiene un doble aspecto, personal y comunitario. Van juntos y no podemos separarlos".
"Somos, sí, llamados individualmente, pero siempre para ser parte de un grupo más grande, caminar juntos escuchando antes de hablar, saber colocarnos según convenga, también en medio y atrás, no sólo delante", indicó.
Finalmente, el Papa Francisco los alentó a "buscar la fraternidad en todos los ambientes sociales, aprender y enseñar a acoger a todos, a trabajar con todos, a buscar soluciones de consenso que tengan un amplio respiro".
"No enrocarnos nunca, ni en el grupo cristiano al que pertenecemos, ni en la responsabilidad que se nos confió, vivir con un espíritu libre, en sana indiferencia", concluyó.