El Obispo Emérito de Hong Kong, Cardenal Joseph Zen, dijo que cree que el difunto Papa Emérito Benedicto XVI será un "poderoso intercesor en el cielo" para la Iglesia Católica en China.
En una reflexión publicada en su blog el 3 de enero, el Purpurado recordó a Benedicto XVI como un "gran defensor de la verdad" que realizó acciones "extraordinarias" para apoyar a la Iglesia en China, a pesar de muchos contratiempos.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Como miembro de la Iglesia china, estoy inmensamente agradecido con el Papa Benedicto por las cosas que ha hecho", escribió el Cardenal Zen.
El Obispo Emérito de Hong Kong recordó la Carta a China que Benedicto XVI escribió en 2007. El Purpurado llamó a este texto "una obra maestra del equilibrio entre la lucidez de la doctrina eclesiológica católica y la comprensión humilde con respecto a la autoridad civil".
El Cardenal Zen también criticó los "errores" en la traducción al chino que se hizo del texto de Benedicto XVI. Indicó que esta contenía "citas sesgadas contra el sentido obvio de la carta".
"Otra cosa extraordinaria que hizo por la Iglesia en China es el establecimiento de una poderosa comisión para ocuparse de los asuntos de la Iglesia en China; desafortunadamente, bajo el nuevo presidente de dicha comisión, esta se ha hecho desaparecer silenciosamente sin siquiera una palabra de despedida respetuosa", agregó el Cardenal.
Benedicto XVI creó cardenal al Obispo Zen en 2006 y lo seleccionó para escribir las meditaciones del Vía Crucis de la Semana Santa de 2008 y que se llevó a cabo en el Coliseo Romano.
El Obispo Emérito de Hong Kong, quien ha sido un crítico abierto del acuerdo provisional de la Santa Sede con China, dijo que no creía que Benedicto XVI debería haberse quedado callado después de renunciar al papado en 2013.
"A mí me parece todo lo contrario: precisamente porque hay confusión en la Iglesia, un Papa emérito, como todo obispo y cardenal mientras tenga aliento y esté en su sano juicio, debe cumplir con su deber como sucesor de los apóstoles a defender la sana tradición de la Iglesia", escribió.
El Cardenal Zen dijo que "en momentos cruciales, incluso el Papa Francisco aceptó esta contribución de su predecesor, como cuando defendió el celibato sacerdotal de la Iglesia Romana en la polémica sobre la propuesta de ordenar 'viri probati'".
El Purpurado subrayó que ve a Benedicto XVI como un Papa que fue "muchas veces incomprendido y a veces no seguido", pero dijo que es "precisamente en estos casos, que parecen ser fracasos, que pude admirar su gran fortaleza y magnanimidad en frente a los contratiempos".
"A pesar de sus grandes esfuerzos, el Papa Benedicto no logró mejorar la situación de la Iglesia en China. No podía aceptar cualquier compromiso", dijo el Cardenal chino.
El Cardenal, que nació en Shanghai, agregó que está "convencido de que todos los esfuerzos para mejorar la situación de la Iglesia en China [en el futuro] deberán realizarse de acuerdo con la carta de 2007".
"Al recordar al gran pontífice, recordemos que ahora lo tenemos como un poderoso intercesor en el cielo. Con su intercesión, oramos para que todos, la Iglesia en Roma, la Iglesia en China y las autoridades chinas sean movidas por la gracia de Dios para lograr la verdadera paz para la Iglesia y nuestra patria", dijo el Cardenal Zen.
Permiso para asistir al funeral
Según AFP, el Obispo Emérito de Hong Kong, que fue arrestado el año pasado bajo la ley de seguridad nacional china, ha sido autorizado por un tribunal local a viajar a Roma esta semana para estar presente en el funeral de Benedicto XVI.
Después de que las autoridades confiscaron su pasaporte, un magistrado dictaminó el 3 de enero que el Cardenal de 90 años puede salir de Hong Kong durante cinco días para el funeral de Benedicto XVI que se realizará el 5 de enero.
Traducido y adaptado por Eduardo Berdejo. Publicado originalmente en CNA.