La sangre de San Genaro se licuó hoy de forma milagrosa por tercera vez en lo que va del año.
De acuerdo al diario italiano Corriere della Sera, el milagro de la licuefacción de la sangre de San Genaro ocurrió a las 10:56 a.m. (hora local), en la Capilla del Tesoro de San Genaro en la Catedral de Nápoles.
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Cuando Mons. Vincenzo De Gregorio, abad de la Capilla del Tesoro, abrió por primera vez por la mañana la caja fuerte que contiene el relicario de San Genaro, la sangre del interior parecía completamente sólida, pero se produjo un cambio dos horas después.
El 16 de diciembre marca el aniversario de la preservación de Nápoles de la erupción del Monte Vesubio en 1631. Este es uno de los tres días del año cuando se exhibe el relicario y los napolitanos locales se reúnen para ver si la masa seca de color rojo confinada a un lado de un relicario cambia para cubrir todo el vidrio.
El milagro es conocido y aceptado localmente, aunque aún no ha recibido el reconocimiento oficial de la Iglesia.
San Genaro es el santo patrón de Nápoles. Se cree que el obispo fue martirizado durante la persecución cristiana del emperador Diocleciano.
En la tradición local, el hecho de que la sangre no se licúe indica guerra, hambruna, enfermedad u otro desastre.
La licuefacción ocurre tradicionalmente al menos tres veces al año: el 19 de septiembre, la fiesta del santo, el primer sábado de mayo y el 16 de diciembre, el aniversario de la erupción de 1631 del cercano Monte Vesubio.
La sangre del obispo del siglo III, contenida en un frasco circular sellado, se licuó tanto en mayo como en septiembre de este año, pero no cambió su estado en diciembre de 2020.
En sus palabras a las personas que se habían reunido en la capilla, Mons. De Gregorio compartió la historia de una curación milagrosa atribuida a la intercesión de San Genaro este año.
"Había un padre muy joven con una niña de solo unos meses en sus brazos y su esposa lloraba a su lado. Explicaron que a esta niña le habían diagnosticado un tumor maligno, y uno puede imaginar el desconcierto y la desolación", dijo, según recoge Il Mattino.
"Estuvieron aquí hoy dando gracias a San Genaro porque al poco tiempo mientras rezaban al santo patrón el 19 de septiembre, llegó la noticia de que el tumor era benigno y la bebé estaba a salvo", expresó.
Traducido y adaptado por David Ramos. Publicado originalmente en CNA.
