Con el lema "María, ruega por nosotros", la comunidad de Mar del Plata (Argentina), vivió este jueves una nueva edición de la tradicional Marcha de la Esperanza. El Obispo, Mons. Gabriel Mestre presidió la Misa y animó a "jugar el partido de Dios".
Miles de peregrinos se convocaron este 8 de diciembre, Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María, para participar de la 49° edición de la Marcha de la Esperanza.
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Se trata de una expresión de fe popular que ya es tradición en la Diócesis, y se lleva a cabo en el tiempo de Adviento, en preparación a la Navidad, como símbolo de la importancia de caminar juntos.
Los fieles partieron a las 16:00 horas desde la gruta de Nuestra Señora de Lourdes, encabezados por la imagen de la Virgen, y caminaron en procesión por los barrios de la ciudad guiados por el lema "María, ruega por nosotros".
La marcha estuvo encabezada por el Obispo de Mar del Plata, Mons. Gabriel Mestre, y contó con la participación de jóvenes de distintos colegios de la Diócesis y de las comunidades parroquiales.
Al llegar a la Catedral de los Santos Pedro y Cecilia, el Obispo presidió la Misa en el atrio y agradeció a los peregrinos por su amor a la Virgen.
En analogía con la Copa Mundial de fútbol que por estos días se disputa en Qatar, y en la que Argentina ya se encuentra en la etapa de Cuartos de Final, expresó: "María es la capitana del partido de la alegría de Dios".
Asimismo, invitó a los fieles "a que podamos jugar juntos 3 partidos": El partido de Dios, el partido de María y el partido de la alegría.
"Con la fuerza de Dios y la intercesión de María juguemos juntos el partido de la alegría que nos viene de Dios, la alegría del Evangelio y alegría que el ángel le trasmite justamente a María", exhortó. "Dejemos que María sea la capitana de nuestra vida", animó.
"María es la capitana del partido de la alegría de Dios", concluyó, pidiendo que "nos enseñe a jugar el partido de Dios y el partido de la alegría siempre y en toda circunstancia".