El Papa Francisco envió a Venezuela una rosa de oro que fue colocada junto a la imagen de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá, en el estado Zulia, durante la Misa por los 313 años de su renovación milagrosa.
La Eucaristía fue celebrada ayer 18 de noviembre en la plazoleta de la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, y estuvo presidida por Mons. Edgar Peña Parra, sustituto para los Asuntos Generales de la Secretaria de Estado de la Santa Sede.
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La rosa de oro es una distinción que los pontífices otorgan a personalidades, santuarios, iglesias, ciudades y advocaciones marianas. Esta tradición está documentada desde el pontificado de León IX (1049-1054), pero tendría su origen a finales del siglo VI o principios del siglo VII.
#18Nov #Chinita313años
- Reporte Ya (@ReporteYa) November 18, 2022
Monseñor José Luis Azuaje recibe el reconocimiento Rosa de Oro para la Virgen de Chiquinquirá, otorgado por el Vaticano. - @VPITV pic.twitter.com/dSMaLj7tyB
En su sitio web, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) informó que Mons. Peña recordó a los fieles presentes que desde 1709 "la presencia vigilante y amorosa de Nuestra Señora de Chiquinquirá ha acompañado al pueblo maracaibero, haciendo brotar la gracia en su divino hijo de la riqueza de la vida cristiana".
"Cuando miramos la imagen de María de Chiquinquirá se nos presenta con el rosario en sus manos, con esto nos anuncia a Cristo y nos recuerda la importancia de la oración y del rezo del Santo Rosario cada día", afirmó en su homilía.
La autoridad vaticana también llamó a defender la institución familiar. "Acerquémonos a este tesoro del amor, para hacer de esta humanidad, una humanidad más fraterna y más estable", expresó.
Asimismo, pidió "por la paz en Venezuela y en el mundo, especialmente en aquellos lugares que más lo necesitan. La paz verdadera nace de la justicia, sin justicia no hay paz, esa justicia que tiene en Dios, su principio y su fin. La paz crece con el perdón y la reconciliación".
Finalmente, dijo que "al celebrar hoy la renovación milagrosa de María Chiquinquirá, se nos invita a una profunda renovación espiritual y un esfuerzo por vivir con toda integridad los compromisos de fidelidad de nuestro bautismo".
La CEV informó que la Misa fue concelebrada por el Arzobispo de Maracaibo, Mons. José Luis Azuaje; el Arzobispo Coadjutor de Mérida, Mons. Helizandro; el Arzobispo de Coro, Mons. Mariano Parra Sandoval; el Obispo de Machiques, Mons. Nicolás Nava; el Obispo de Cabimas, Mons. Ángel Caraballo; el Obispo de Carora, Mons. Carlos Curiel; y el Arzobispo Emérito de Maracaibo, Mons. Ubaldo Santana.
Historia de la imagen
En el año 1709, una humilde lavandera de nombre María Cárdenas encontró una pequeña tablita en las orillas del Coquivacoa (Lago de Maracaibo), la llevó a su casa para usarla como tapa de una tinaja de agua.
Sin embargo, el 18 de noviembre de ese año, cuando la mujer estaba colando café, se percató que en la tablita había una imagen de la Virgen María, por lo que la colgó en la pared.
Al rato escuchó unos golpes como si alguien estuviera llamando. Se acercó para ver lo que sucedía y quedó asombrada ante el brillo que emanaba la imagen de Nuestra Señora de Chiquinquirá. Tras la conmoción gritó: "¡Milagro! ¡Milagro!". Los vecinos acudieron a la casa de la señora y corroboraron la existencia de la sagrada imagen.
La imagen de la Virgen de Chiquinquirá de Venezuela no es una copia de la devoción colombiana que lleva el mismo nombre. Ambas son consideradas originales, por lo que se afirma que la Madre de Dios se apareció en ambos países.